La reforma y ampliación de la Bombonera formó parte de la plataforma de Jorge Amor Ameal en las últimas dos elecciones, como caballito de batalla luego de que en la gestión de Daniel Angelici se contemplara -y provocara rechazo entre los hinchas- la posibilidad de construir un nuevo estadio. Pero una vez al frente del club, el presidente y su dirigencia se encontraron con que no sería tan sencillo llevar adelante la obra. Y en dos años y medio de gestión, parece complicado que puedan cumplir. ¿Entonces Boca no reformará su estadio?
“Nosotros tenemos un plan. Nuestro proyecto es La Bombonera 360, con capacidad para 80.000 personas. Hoy tenemos 240.000 socios. Es difícil, pero no imposible. Boca está acostumbrado a los imposibles”, dijo un Ameal en TyC Sports.
“Estamos trabajando, no paramos nunca. ¡Dos años de pandemia! Dentro de eso hay gente que especula con valores. Tenemos que tener una economía sólida para poder resolver ese problema”, agregó.
La realidad es que, en poco más de un año, Ameal pasó de mostrarse “muy optimista” en sus declaraciones en los medios a reconocer las dificultades del caso y hablar de “imposibles”.
Por el momento, según pudo averiguar Olé, Boca apenas avanzó unos pasos hacia la reforma y sigue como a inicios de 2020 en búsqueda del financiamiento para comprarlas las 129 propiedades (95 departamentos, 20 casas, 9 casas con local, 5 departamentos con local y 1 otros) ubicadas en las dos medias manzanas entre Del Valle Iberlucea, Brandsen, Aristóbulo del Valle y Antonio Zolezzi.
“Estamos buscando la economía, tenés que tener ingeniería económica para no afectar el plantel y las actividades, y poder hacer la obra. Hoy el naming no lo tenemos presente, me parece bien que River lo haya hecho. Estamos trabajando con instituciones bancarias, con las cuales no estamos lejos, y en toda la sponsorización”, aclaró el presidente.
En ese punto es donde entró un año atrás un vínculo con China que Ameal ya tenía desde antes de las elecciones y que recién pudo empezar a afianzar a partir de haber vuelto a la presidencia del club. La primera movida visible fue el saludo por el Año Nuevo y luego, en una de las reuniones de Comisión Directiva, se aprobó la apertura de una oficina de ese país en el estadio. Sí, una oficina dentro del estadio.
¿El dinero podría llegar a través de un banco chino? “Estamos estudiando todos chino (mandarín)”, respondió Ameal, entre algunas risas. “Te cuento: es gente muy seria, las decisiones las elaboran, y el país también está en un contexto. Pero estamos bien”.
El costo estimado entre propiedades y obra se calculó en 80.000.000 de dólares, según dijeron a Olé desde las oficinas xeneizes.
A la vez, Boca todavía tiene como cuenta pendiente acercarse y mejorar la relación con los vecinos de las dos medias manzanas que debería comprar. El relevamiento que maneja la dirigencia es el que realizó el Colegio Profesional Inmobiliario durante el 2017 por pedido de Angelici.
Y pese a que el presidente dijo que están avanzando sobre el tema, los vecinos niegan contactos de la actual dirigencia y recuerdan una reunión previa a las elecciones en la cual los amenazaron con una expropiación.
Si bien la pandemia demoró todo, el plazo estimado de obra por la dirigencia para ampliar el Templo no se modifica y es desde el día en que inicien los trabajos de unos 30 meses, bastante más de lo que le queda a la actual gestión de Ameal.
¿Y el Proyecto Esloveno?
Ahora, por el momento, Ameal no habló de dejar Bombonera 360 y a la vez descartó la posibilidad de ir por el Proyecto Esloveno, que necesita para la ampliación sólo las 67 propiedades frentistas (que ya dieron el ok y aceptan vender) en vez de las 129 para llegar a 75.000 espectadores. De hecho, el presidente se suele enojar mucho cuando le mencionan esa alternativa y esta vez lo destrozó como nunca…
“¿Y el Proyecto Esloveno? No, porque sabés que pasa. Eso lo vivimos previo a las elecciones. Es un proyecto sin sentido, porque parte de las dos manzanas tenes que comprar, y contrafrente tenés vecinos, y otra vez la misma historia”, dijo de la idea que fue puesta a disposición de Juan Román Riquelme como alternativa para la ampliación.