No sin cierta dosis de sorna, un compañero endocrinólogo, ha puesto en nuestro grupo de WhatsApp la infografía que publica en su página web el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de La Mancha, en la que anima a consumir vino bajo el lema: “¿Por qué tomar vino tinto? 1-2 copas de vino tinto al día benefician notablemente la salud”.
El alcohol, incluso a bajas dosis, eleva el riesgo cardiovascular
Reconozco que siento una enorme pereza al intentar rebatir, con argumentos científicos, iniciativas con una fuerte repercusión económica y tan proclives a la manipulación política. No tenemos más que recordar la reciente polémica artificial, manipuladora, oportunista y zafia sobre la recomendación de organismos científicos internacionales, tan poco sospechosos de ser de izquierda radical como la International Agence for Research on Cancer de la OMS o The EAT-Lancet Commission on Healthy Diets From Sustainable Food Systems, ésta última patrocinada por la Fundación Rockefeller, de reducir el consumo de carne por motivos de salud y medioambientales.
Algún político dirá “¡Ahora van a por el vino!”, pero es que, desde el ámbito de la evidencia científica, afirmaciones que aparecen en esta infografía sobre supuestos beneficios del consumo de vino, tales como que mejora la salud cardiovascular; reduce la tensión arterial o el riesgo de tener infarto cardíaco y cerebral, contiene propiedades anticancerígenas, retrasa en envejecimiento, alivia digestiones pesadas, mejora la salud sexual o el patrón de sueño hace varios años que quedaron claramente desacreditados y, a día de hoy son, desde el punto de vista médico, totalmente insostenibles.
Por otra parte, curiosamente, a pesar de ser una bebida con una alta tasa de consumo, y con un valor nutricional muy pobre, las autoridades sanitarias consienten en que su etiquetado nutricional es el más opaco y el que menos información ofrece al consumidor.
Cuanto menos alcohol, mejor
Siguiendo las recomendaciones de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, que nos advierte que el alcohol, incluso a bajas dosis, eleva el riesgo cardiovascular y el de, al menos, siete tipos de cáncer, solo hay un único consejo posible para la población: cuanto menos alcohol, mejor.
Me pregunto si la Consejería de Sanidad tiene algo que decir, o se va a poner de perfil y pasar de puntillas, como ya lo hizo con el tema del consumo de carne.
Referencias bibliográficas:
- GBD 2016 Alcohol Collaborators. Alcohol use and burden for 195 countries and territories, 1990–2016: a systematic analysis for the Global Burden of Disease Study 2016. August 23, 2018. http://dx.doi.org/10.1016/ S0140-6736(18)31310-2.
- Yoon-Jung Choi et al. Light Alcohol Drinking and Risk of Cancer: A Meta-Analysis of Cohort Studies. Cancer Res Treat. 2018;50(2):474-487. https://doi.org/10.4143/crt.2017.094
- Wood, MA et al. Risk thresholds for alcohol consumption: combined analysis of individual-participant data for 599912 current drinkers in 83 prospective studies. Lancet 2018; 391: 1513–23. DOI: 10.1016/S0140-6736(18)30134-X. Free PMC article.
- https://www.seen.es/portal/hablemos-de-nutricion/alcohol-metabolismo