Max Weber creía que una de las dificultades del oficio del político es que no siempre se puede decir la verdad.
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Para algunas personas, el discurso de Petro ofrece esa ilusión de una Colombia más justa, en la que la columna vertebral sería un cambio de sistema político y económico que permita lograr ese objetivo. Podemos enmarcar lo que ha generado Gustavo Petro en muchos colombianos en una ideología, es decir, “aquel conjunto de ideas característico de un grupo o clase social que permiten legitimar un poder político”, como lo diría Terry Eagleton. Este autor también afirma que las ideologías que tienen éxito deben ser más que ilusiones impuestas, transmitir a sus súbditos una visión de la realidad social que sea real y reconocible, o de lo contrario sería una ilusión social masiva.
Thomas Piketty, reputado economista francés, asegura que “el populismo no es más que una respuesta confusa, pero legitima, al sentimiento de abandono de las clases trabajadoras de los países desarrollados frente a la globalización y a la creciente desigualdad”, Colombia no es un país desarrollado, pero esta frase podría explicar por qué Petro será el próximo mandatario del país. Muchos tildan a Petro de populista, pero como lo dice Chantal del Sol: “los populismos contemporáneos aparecen justamente en los déficits de la democracia”, tal vez, el abismo que existe en nuestro país entre los muy ricos y los muy pobres ha hecho que los segundos empiecen a buscar una persona que pueda ir cerrando esa brecha y les permita tener acceso a algo tan básico como agua potable, educación, comida, salud, internet, y otros más, que entran en el marco del progreso. La pregunta que queda es si Petro les puede dar lo que les está prometiendo.
Para todo lo que piensa hacer Petro, de llegar a la Presidencia de la República, va a necesitar mucho dinero, y muchos economistas del país se preguntan de dónde van a salir esos recursos.
El discurso de Petro es su mejor carta de presentación, porque le llega a la gente, dice lo que las personas esperaban escuchar hace muchos años, porque les dibuja una sociedad igualitaria donde todos tengan acceso a lo que siempre se les ha negado, donde los privilegios no sean para unos pocos, donde la gente no tenga que hacer colas esperando en un hospital para que la atiendan; donde las personas no aguanten hambre como pasa en diferentes departamentos del país, donde tengan un techo para vivir, y demás carencias que deben soportar muchos compatriotas. Él promete hacer un cambio radical que permita a toda esa gente soñar con un país que no los mire con indiferencia. Por lo menos, eso es lo que en el discurso se le escucha decir a Petro.
Todos los temas mencionados por Petro tienen que ver con dinero, con recursos, con el presupuesto nacional, porque desafortunadamente todo en esta vida es dinero y el máximo líder del Pacto Histórico lo sabe muy bien. Para todo lo que piensa hacer Petro, de llegar a la Presidencia de la República, va a necesitar mucho dinero, y muchos economistas del país se preguntan de dónde van a salir esos recursos y se cuestionan qué pasará con la economía de llegar Petro al poder. En una entrevista con Fernando Quijano, director del diario La República, Petro se pronunció sobre el petróleo, el carbón y lo que será de esas exportaciones en caso de llegar a la Casa de Nariño: “Se debe descarbonizar la economía y ese tema de los combustibles fósiles llegará a su fin. He propuesto cesar la exploración de petróleo”, y además fue contundente y reiterativo en su respuesta: “cesaría la exploración de petróleo y carbón, estos llegan a su final, nos guste o no”, y agregó: “se reemplazarán las divisas minero energéticas por turismo”.
Eso que propone Petro suena muy bonito, pero necesita tiempo para poderlo llevar a cabo. Hace pocos días, el candidato Petro dijo en Caucasia, Antioquia: “Vamos a proponerles a los poseedores de tierras la mayoría improductivas, que a cambio de que el Estado les haga más fértil la tierra a través de canales de riego, entreguen parte de su tierra para las familias campesinas”, y es eso precisamente lo que preocupa a muchos empresarios que por herencia, inversión y otras razones, tienen tierras que por diferentes razones no pueden poner a producir, pero que tampoco quieren vender porque esperan que en algún momento lo puedan hacer.
Como se puede ver en las respuestas de Petro, no hay que imaginar, especular, asegurar, cómo sería un gobierno del máximo líder de la Colombia Humana, porque él mismo dice lo que quiere hacer si logra llegar a la Casa de Nariño.
Jorge Rojas, quien fue secretario de Gobierno de Gustavo Petro y es muy cercano al candidato de Colombia Humana, dijo en entrevista con La Silla Vacía, que “el Pacto Histórico es un proyecto de largo plazo (como la concertación nacional en Chile)”, vale la pena aclarar que esa concertación de la que habla Rojas fue una coalición de partidos de izquierda, centroizquierda y centro que gobernó el país austral durante dos décadas y no sé si los colombianos quieran tener una administración de ese corte por tanto tiempo. Es decir, que cuatro años no serán suficientes para consolidar el cambio del que habla Petro.
En muchos sectores de Colombia se ve a Petro como una amenaza para el statu quo, piensan desde diferentes sectores que como vamos, vamos bien, pero la otra parte del país quiere un cambio, lo que no se tiene claro es si Petro es eso que pide y espera la gente.
JOSÉ LUIS QUERUBÍN
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