Esta semana nos anticipamos a las celebraciones por el 8M, Día de la Mujer, con una selección de libros de no ficción que rescatan vidas y obras de grandes mujeres. Uno de los más recientes, Mis pies tienen raíz, está dedicado a mujeres del mundo de habla hispana, como Angélica Gorodischer (que murió el 5 de febrero a los 93 años), Juana Azurduy, Gabriela Mistral y María Elena Walsh. También incluimos dos títulos ilustrados que integran la colección Pequeña & Grande: uno sobre Mary Shelley y otro sobre Coco Chanel. En el bonus track hay excelentes noticias sobre autores e ilustradores argentinos del campo de la literatura infantil. Pasen y lean.
Mis pies tienen raíz. Mujeres del mundo de habla hispana, de Cúmulo de Tesla y Atenea Castillo (Océano Travesía). Angélica Gorodischer, Juana Azurduy, Gabriela Mistral, María Luisa Bemberg y María Elena Walsh son algunas de las mujeres incluidas en este libro creado por el colectivo interdisciplinario Cúmulo de Tesla, dedicado a difundir la ciencia, el arte y la literatura, y la dibujante mexicana Atenea Castillo, cuyos retratos a toda página resultan imponentes. Como aclaran en la introducción, las elegidas están vinculadas, de una manera u otra, con Sor Juana Inés de la Cruz.
A diferencia de la mayoría de los libros de biografías orientados al público infantil que salieron en los últimos años, Mis pies tienen raíz ofrece reseñas breves centradas en uno o algunos aspectos de la vida de cada una. Entre las seleccionadas figuran, también, las mujeres impresoras que se dedicaron a esa tarea entre los siglos XVI y XVIII en el actual territorio de México y las cocineras de los conventos peruanos del monasterio de Santa Catalina en el virreinato del Perú.
Mary Shelley, de María Isabel Sánchez Vegara (Catapulta Junior). De la colección Pequeña & Grande, con ilustraciones de Yelena Bryksenkova, la vida de la autora de Frankenstein está narrada con textos breves para los más chicos. A partir de algunos sucesos biográficos relevantes, como la muerte temprana de su madre y el romance con Percy Shelley, la historia está centrada en la famosa anécdota de la creación del monstruo de ficción y cómo se le ocurrió la idea a Mary a partir del desafío creativo de lord Byron.
Otro título reciente de la misma serie y autora, en este caso ilustrado por Marta Antelo, está dedicado a Rosa Parks, una activista por los derechos civiles que se convirtió en referente en la lucha contra la segregación racial en los Estados Unidos. De la misma autora también recomendamos Coco Chanel, ilustrado por Ana Alberto, que eligió usar blanco y negro en las imágenes para estar a tono con el célebre look que impuso Coco en sus prendas. Los textos son breves y están escritos con humor y en rima. Y las ilustraciones son menos realistas que en otros libros del género biografías para chicos. Eso lo hace distinto.
La desobediente, de Paula Bombara (Loqueleo). Vuelvo a recomendar esta novela dirigida a lectores adolescentes y jóvenes porque me fascina. La autora de La chica pájaro, entre otros títulos para distintas edades, cuenta una historia de “desobediencia” femenina en formato epistolar. En la trama aparecen una joven huérfana adoptada por sus tíos, el doctor Viktor Frankenstein, su célebre criatura y la ciencia como protagonistas. Con el trasfondo de los grandes avances de la ciencia a fines del siglo XVIII, la novela rinde homenaje a las primeras feministas, esas mujeres que lucharon para poder estudiar, investigar, enseñar y enamorarse sin aceptar imposiciones.
Amanda y el cuerpo, de Mariana Gardella y Mariela Califano (Capital Intelectual). De la misma autora de Amanda, pensadora y con dibujos de la misma ilustradora, este título de la colección Filosofía ¡Quiero más! aborda un tema delicado: el cuerpo (el de cada uno y el de los demás) y todo lo que podemos hacer en distintas edades. Jugar, saltar, cantar, dibujar, pensar, leer e inventar cosas, por ejemplo. Y mucho más. Gardella habla también sobre las emociones y los sentimientos y aporta pistas al final sobre las preguntas y los temas que se pueden “trabajar” en casa o en la escuela a partir de lo que dice y lo que se pregunta Amanda.
El año pasado se publicó Amanda y la muerte, de la misma serie, que invita a reflexionar sobre qué significa el fin de la vida, cómo se rinde homenaje a los seres queridos en países como México y qué sostienen sobre la muerte diversas corrientes filosóficas.
El próximo 21 de marzo, en la Feria del Libro de Bologna, se conocerán los ganadores del prestigioso premio internacional Hans Christian Andersen 2022. Este año, por primera vez, dos argentinos llegaron a la gran final: la escritora María Cristina Ramos y el ilustrador Gusti quedaron en la short list entre candidatos de todo el mundo en las dos categorías.
Conocido como “el pequeño Nobel”, el Andersen es otorgado por la asociación IBBY (International Board on Books for Young People) cada dos años. De la Argentina, por el momento, solo lo ganó la autora cordobesa María Teresa Andruetto.
Además, IBBY publica una “lista de honor” con títulos de todo el mundo. En la selección 2022 hay 163 libros nominados; entre ellos, Y dormirás cien años, de Sebastián Vargas, y El infinito, de Pablo Bernasconi. Felicitaciones.
Para llegar hasta el sol, de María Cristina Ramos (Loqueleo). Un poemario de la autora mendocina radicada en Neuquén, finalista del premio Hans Christian Andersen. Ilustrado por Carolina Farías, el libro está integrado por doce poemas dedicados a la naturaleza, que invitan a jugar con las palabras y los sonidos. “Soy una militante de la poesía. Suelo hacer trampa y siempre meto algo de poesía en mi narrativa”, dice Ramos. Es autora, entre otros libros, de La casa del aire: literatura en la escuela (Ruedamares), que aporta recursos didácticos para que los docentes trabajen con consignas de escritura creativa en las aulas.
La mosca, de Gusti (Calibroscopio). ¿Se imaginan una mosca esperando el día ideal para darse un gran baño? Bueno, parece que ese día propicio llegó y la mosca protagonista de este cuento genial se prepara para disfrutarlo. “Tenía todo lo que una mosca necesitaba –cuenta el autor–. Un bolso, un poco de crema bronceadora, una toalla y la pelota. ¡Perfecto!”. Lo que no se imaginó la ilusa mosca es cómo seguiría ese día en apariencia ideal que se convirtió luego en pesadilla. Original, divertido, con dibujos que parecen pintados con témperas por chicos, es un libro súper recomendado para disfrutar entre padres e hijos y reírse con complicidad por el final inesperado.
Miedoso, de Pablo Bernasconi (Sudamericana). “Para Nina, minina. Porque no hay más valiente / rugido en el mundo / que el canto rotundo / del miedo ausente. Para todos los profesionales de la medicina que dedican sus vidas a tratar la diabetes infantil”. El autor e ilustrador dedica el libro a su pequeña hija, Nina, y la convierte en protagonista. Sin nombrar la enfermedad de manera directa, Bernasconi creó un cuento sobre los monstruos y los miedos. Una historia que combina ternura y humor en dosis perfectas.
Yuelán, de Sebastián Vargas (Edelvives). Un libro fascinante para lectores autónomos que se enganchan con las historias de épocas remotas rodeadas de mitos y leyendas. De la colección Premios Ala Delta (el autor ganó la edición 2020 del XXXI concurso de literatura infantil), está inspirado en la trama que dio lugar a la ópera Turandot, de Puccini. “Los buenos relatos pueden tener muchos nombres y vivir muchas vidas”, dice el narrador cuando empieza a contar esta historia fantástica que tiene que ver con los nombres y la identidad y también con el amor y los deseos. Un gran acierto son los guiños que hace el narrador cuando “interrumpe” el relato para hablarle directo a los lectores.