El legislador instó a que la propuesta sobre el futuro mecanismo que redacte la nueva constitución sea defendida por ambas coaliciones de gobierno, aunque se abrió, por ejemplo, a generar concesiones sobre el “árbitro” de las bases constitucionales.
Miércoles 19 de octubre 2022 13:45 hrs.
Con las propuestas sobre la mesa, se espera que dentro de los próximos días los partidos políticos con representación parlamentaria continúen con las conversaciones para definir temas, tales como la entidad que fiscalizará el cumplimiento de las bases constitucionales y el mecanismo, es decir, la forma con que se conformará el órgano que redactará la nueva constitución.
En relación al “árbitro” de las bases las distintas fuerzas políticas han transparentado su posición, manifestándose grandes diferencias. Así, en el oficialismo apuestan por un órgano jurisdiccional como la Corte Suprema; en tanto, Chile Vamos, porque sea el Congreso.
Sin embargo, el lunes pasado el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Raúl Soto, apuntó a una nueva alternativa hacia la cual habría una cierta apertura de parte de algunos sectores: una comisión bicameral, entre la Cámara y el Senado.
En el caso del mecanismo también hay disensos pendientes, puesto que aún las fuerzas no se han decidido por una entidad 100% electa o mixta, es decir, con miembros electos y designados. No obstante, algunos dirigentes de Socialismo Democrático se han mostrado abiertos a esta segunda opción.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado del Partido Radial y uno de los actores de las negociaciones, Tomás Lagomarsino, fue crítico respecto de la definición del mecanismo, señalando que “creo que la mayor línea roja el día de hoy es que un órgano 100% electo redacte la nueva constitución y para ello por supuesto que me parece que tiene que ser un principio defendido ampliamente tanto por Apruebo Dignidad como Socialismo Democrático, pero debemos ir transando algunas otras cosas”.
Por lo mismo, el legislador dijo esperar que “todos tengamos la convicción de que la principal lucha del día de hoy es tener un órgano 100% electo que redacte una propuesta de nueva constitución, para que le dé la legitimidad que requiere”.
De todas maneras, comentó que si bien esta es una de las materias que la colectividad defiende con mayor fuerza, sí hay espacio para flexibilizar en otros aspectos del futuro organismo, tales como número de integrantes o la entidad que oficiará como árbitro de las bases constitucionales.
Sobre esto último, mencionó que “si es que para aquello se requiere que el árbitro sea el Congreso Nacional y no la Corta Suprema, nosotros estamos abiertos”, dijo.
Con todo, el parlamentario valoró los avances de las conversaciones y expresó que “más que destacar aquellos puntos que nos separan, prefiero relevar el compromiso de las distintas fuerzas políticas por una buena y nueva constitución hecha en democracia y democráticamente”.
“Es por ello que fruto de estos diálogos esperamos conciliar las distintas visiones que están puestas sobre la mesa que vaya más allá de los 4/7. Entre mayor transversalidad más legitimidad va a tener este proceso y así habilitar la redacción de una nueva constitución con los mecanismos que se acuerden finalmente”, manifestó.
En cuanto a los plazos para materializar este consenso, el legislador planteó que “dado que Chile Vamos tiene un fetiche con que el acuerdo no se firme en octubre, porque les suena a ‘octubrismo’, no tengo ningún inconveniente de que podamos apurar el tranco y firmar a principios de noviembre”.
“Hay temas muy relevantes el día de hoy sobre la mesa. El diputado (Jaime Araya) ya habló hace pocos días de que antes de zanjar un acuerdo constitucional, tenemos que zanjar un acuerdo sobre seguridad. Entonces, tratemos de cerrar este capítulo antes de que a la ciudadanía se le acabe la paciencia”, aseveró Lagomarsino.
Si bien este miércoles se esperaba una nueva reunión multilateral entre el oficialismo, la Democracia Cristiana y la oposición en el Congreso Nacional en Valparaíso , finalmente fue suspendida.
Con las propuestas sobre la mesa, se espera que dentro de los próximos días los partidos políticos con representación parlamentaria continúen con las conversaciones para definir temas, tales como la entidad que fiscalizará el cumplimiento de las bases constitucionales y el mecanismo, es decir, la forma con que se conformará el órgano que redactará la nueva constitución.
En relación al “árbitro” de las bases las distintas fuerzas políticas han transparentado su posición, manifestándose grandes diferencias. Así, en el oficialismo apuestan por un órgano jurisdiccional como la Corte Suprema; en tanto, Chile Vamos, porque sea el Congreso.
Sin embargo, el lunes pasado el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Raúl Soto, apuntó a una nueva alternativa hacia la cual habría una cierta apertura de parte de algunos sectores: una comisión bicameral, entre la Cámara y el Senado.
En el caso del mecanismo también hay disensos pendientes, puesto que aún las fuerzas no se han decidido por una entidad 100% electa o mixta, es decir, con miembros electos y designados. No obstante, algunos dirigentes de Socialismo Democrático se han mostrado abiertos a esta segunda opción.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado del Partido Radial y uno de los actores de las negociaciones, Tomás Lagomarsino, fue crítico respecto de la definición del mecanismo, señalando que “creo que la mayor línea roja el día de hoy es que un órgano 100% electo redacte la nueva constitución y para ello por supuesto que me parece que tiene que ser un principio defendido ampliamente tanto por Apruebo Dignidad como Socialismo Democrático, pero debemos ir transando algunas otras cosas”.
Por lo mismo, el legislador dijo esperar que “todos tengamos la convicción de que la principal lucha del día de hoy es tener un órgano 100% electo que redacte una propuesta de nueva constitución, para que le dé la legitimidad que requiere”.
De todas maneras, comentó que si bien esta es una de las materias que la colectividad defiende con mayor fuerza, sí hay espacio para flexibilizar en otros aspectos del futuro organismo, tales como número de integrantes o la entidad que oficiará como árbitro de las bases constitucionales.
Sobre esto último, mencionó que “si es que para aquello se requiere que el árbitro sea el Congreso Nacional y no la Corta Suprema, nosotros estamos abiertos”, dijo.
Con todo, el parlamentario valoró los avances de las conversaciones y expresó que “más que destacar aquellos puntos que nos separan, prefiero relevar el compromiso de las distintas fuerzas políticas por una buena y nueva constitución hecha en democracia y democráticamente”.
“Es por ello que fruto de estos diálogos esperamos conciliar las distintas visiones que están puestas sobre la mesa que vaya más allá de los 4/7. Entre mayor transversalidad más legitimidad va a tener este proceso y así habilitar la redacción de una nueva constitución con los mecanismos que se acuerden finalmente”, manifestó.
En cuanto a los plazos para materializar este consenso, el legislador planteó que “dado que Chile Vamos tiene un fetiche con que el acuerdo no se firme en octubre, porque les suena a ‘octubrismo’, no tengo ningún inconveniente de que podamos apurar el tranco y firmar a principios de noviembre”.
“Hay temas muy relevantes el día de hoy sobre la mesa. El diputado (Jaime Araya) ya habló hace pocos días de que antes de zanjar un acuerdo constitucional, tenemos que zanjar un acuerdo sobre seguridad. Entonces, tratemos de cerrar este capítulo antes de que a la ciudadanía se le acabe la paciencia”, aseveró Lagomarsino.
Si bien este miércoles se esperaba una nueva reunión multilateral entre el oficialismo, la Democracia Cristiana y la oposición en el Congreso Nacional en Valparaíso , finalmente fue suspendida.
Con las propuestas sobre la mesa, se espera que dentro de los próximos días los partidos políticos con representación parlamentaria continúen con las conversaciones para definir temas, tales como la entidad que fiscalizará el cumplimiento de las bases constitucionales y el mecanismo, es decir, la forma con que se conformará el órgano que redactará la nueva constitución.
En relación al “árbitro” de las bases las distintas fuerzas políticas han transparentado su posición, manifestándose grandes diferencias. Así, en el oficialismo apuestan por un órgano jurisdiccional como la Corte Suprema; en tanto, Chile Vamos, porque sea el Congreso.
Sin embargo, el lunes pasado el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Raúl Soto, apuntó a una nueva alternativa hacia la cual habría una cierta apertura de parte de algunos sectores: una comisión bicameral, entre la Cámara y el Senado.
En el caso del mecanismo también hay disensos pendientes, puesto que aún las fuerzas no se han decidido por una entidad 100% electa o mixta, es decir, con miembros electos y designados. No obstante, algunos dirigentes de Socialismo Democrático se han mostrado abiertos a esta segunda opción.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado del Partido Radial y uno de los actores de las negociaciones, Tomás Lagomarsino, fue crítico respecto de la definición del mecanismo, señalando que “creo que la mayor línea roja el día de hoy es que un órgano 100% electo redacte la nueva constitución y para ello por supuesto que me parece que tiene que ser un principio defendido ampliamente tanto por Apruebo Dignidad como Socialismo Democrático, pero debemos ir transando algunas otras cosas”.
Por lo mismo, el legislador dijo esperar que “todos tengamos la convicción de que la principal lucha del día de hoy es tener un órgano 100% electo que redacte una propuesta de nueva constitución, para que le dé la legitimidad que requiere”.
De todas maneras, comentó que si bien esta es una de las materias que la colectividad defiende con mayor fuerza, sí hay espacio para flexibilizar en otros aspectos del futuro organismo, tales como número de integrantes o la entidad que oficiará como árbitro de las bases constitucionales.
Sobre esto último, mencionó que “si es que para aquello se requiere que el árbitro sea el Congreso Nacional y no la Corta Suprema, nosotros estamos abiertos”, dijo.
Con todo, el parlamentario valoró los avances de las conversaciones y expresó que “más que destacar aquellos puntos que nos separan, prefiero relevar el compromiso de las distintas fuerzas políticas por una buena y nueva constitución hecha en democracia y democráticamente”.
“Es por ello que fruto de estos diálogos esperamos conciliar las distintas visiones que están puestas sobre la mesa que vaya más allá de los 4/7. Entre mayor transversalidad más legitimidad va a tener este proceso y así habilitar la redacción de una nueva constitución con los mecanismos que se acuerden finalmente”, manifestó.
En cuanto a los plazos para materializar este consenso, el legislador planteó que “dado que Chile Vamos tiene un fetiche con que el acuerdo no se firme en octubre, porque les suena a ‘octubrismo’, no tengo ningún inconveniente de que podamos apurar el tranco y firmar a principios de noviembre”.
“Hay temas muy relevantes el día de hoy sobre la mesa. El diputado (Jaime Araya) ya habló hace pocos días de que antes de zanjar un acuerdo constitucional, tenemos que zanjar un acuerdo sobre seguridad. Entonces, tratemos de cerrar este capítulo antes de que a la ciudadanía se le acabe la paciencia”, aseveró Lagomarsino.
Si bien este miércoles se esperaba una nueva reunión multilateral entre el oficialismo, la Democracia Cristiana y la oposición en el Congreso Nacional en Valparaíso , finalmente fue suspendida.
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