La celebración se instauró en 2008 por medio de las principales revistas especializadas en videojuegos del mercado para festejar esta herramienta lúdica que con el paso del tiempo se ha ido instaurando en nuestras vidas para quedarse. A día de hoy no solo se ha convertido en una de las principales formas de entretenimiento, motivado por el aumento de las nuevas tecnologías, sino que se a convertido en una forma de vida y en un instrumento de trabajo, estos motivos han originado en algunos individuos cierta dependencia y adicción. De hecho, la OMS la ha incluido en la lista de enfermedades mentales.
Según el jefe del Servicio de Psiquiatría del Gregorio Marañón, Francisco Ferre, desde el punto de vista neurocientífico, se dan los mismos procesos cerebrales “en una persona que es adicta a la cocaína que en una que es adicta a los videojuegos“. Para combatir contra esta dependencia comportamentales, es decir sin sustancias, el Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha puesto a “disposición de todos los usuarios un recurso pionero por el cual se puede pedir cita online en un sistema de cribado y detección de posibles adicciones”.
Para festejar esta festividad te proponemos usos del videojuego que van más allá del entretenimiento.
Los videojuegos como herramienta para ayudar a solucionar la España vaciada
Gracias a las nuevas tecnologías se ha expandido de una forma vertiginosa el concepto de que esta nos aleja de la naturaleza. Sin embargo, Emilio Sáez irrumpe en escena para desmitificar este pensamiento. El profesor de comunicación en la Jaume I ha confeccionado un ciclo con sus alumnos sobre videojuegos enfocados en la problemática rural contra la despoblación rural. “Al igual que se hacen videojuegos con temas muy recurrentes de aventuras y de temas bélicos, existen otros problemas que se pueden convertir en juegos en su resolución”.
Por ello “enfrentó” a los alumnos del grado de diseño y desarrollo de videojuegos a la conversión de esta contrariedad que azota a muchos puntos del territorio español. “Los alumnos se reunieron con técnicos de pueblos del interior de Castellón para que les explicasen cuáles eran los problemas que estaban viviendo estos municipios. Y los otros tomaron buena nota, hicieron sus planteamientos de diseño y luego pasaron a desarrollarlos”.
Una propuesta de concienciación que lanzan el mensaje del problema y que han dado como resultado una serie de videojuegos que reflejan virtualmente una traba real. “Villaconocida, trata de una familia que se muda a través del teletrabajo a un pueblo para estar con el padre de la señora que necesita cuidados. Y entonces la familia se plantea vivir en el pueblo y teletrabajar en sus trabajos. Lo que pasa es que se encuentran con muchos problemas”. Far Away, Mayor, El forn de Babalà, Rural glitch, Fountaine of memories, Llim, Rangi y Una semana solitaria de febrero son algunas de las propuestas que plantean.
¿Se pueden considerar patrimonio cultural?
La respuesta es sí, gracias a la modificación de la Ley de Depósito Legal donde aparece recogido los videojuegos como un “producto obligatorio de depósito en la Biblioteca Nacional”. Esto significa que los videojuegos tienen el mismo tratamiento que las películas, los libros o cualquier otro artículo cultural. María Jesús Morillo, coordinadora de este proyecto de preservación en la BNE, asegura que para ellos es fundamental garantizar que todos aquellos videojuegos que se editan en el país sean catalogados para conservarlos en un futuro.
La íntima conexión entre la ciencia y los videojuegos
Ambos se retroalimentan mutuamente intercambiándose información. Por ejemplo, la ciencia “ha cogido premisas de la ciencia ficción clásica para hacer investigaciones o abrir debates éticos”. Erik Aostri explica que los científicos han estudiado el cerebro en base a los efectos de los videojuegos. “Lo hacen en un sentido de cognición, coordinación y gamificación de procesos” Asimismo, para crear una ficción se han cogido muchos elementos de conocimiento real, “para crear al final una o una ficción en la que entras más fácilmente”. Es por ellos que en el mercado nos encontramos videojuegos de distintos hitos como “la oveja Dolly”, “las células madre”, “la memoria genética”,”la secuenciación del genoma humano”, entre otros. Estos y muchos otros puntos de la “ciencia terrenal” se jan visto reflejados en algún videojuego.
El videojuego, un gimnasio para tu cerebro
¿Y tú? ¿Buscas problemas? La respuesta es sencilla, no. Sin embargo, a lo largo de la vida aparece un montón de adversidades, enigmas, errores y misterios que debemos resolver, por lo que la vida es como un juego. La saga del Profesor Layton traspasa todos estos problemas al mundo ficticio, se nos “presenta una historia de misterio con diversos giros, como una novela de detectives”. Y como jugadores debemos resolver esos acertijos, puzles de lógica, ejercicios de comprensión lectora… para averiguar el final de la historia.
Este no es un videojuego más, un estudio pionero de la mano de Roberto Colom, catedrático de Psicología de la Universidad Autónoma de Madrid y María Ángeles Quiroga, profesora de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid, demuestra los efectos positivos que han observado en el cerebro de los participantes tras la resolución de los problemas del profesor Layton. “ Hemos observado cambios muy interesantes a tres niveles fundamentales. Por un lado, en cuanto a cambios en materia gris. Hay incrementos en ciertas regiones claves para la inteligencia. También hay un cambio en la conexión de materia blanca entre distintas regiones cerebrales. Y en último lugar, hemos encontrado cambios en cómo se conectan distintas regiones cerebrales funcionalmente en reposo, lo cual ayuda a que tengas una predisposición más intensa para la actividad intelectual”, concluía Roberto Colom.