Para el magister Héctor Moreno, jefe de nutrición y dietética del Hospital de Especialidades Pediátricas “Omar Torrijos Herrera” (HEPOTH), el problema de la obesidad infantil no puede ser tomado a la ligera y muchas veces, el inconveniente inicia porque los padres de familia, en su mayoría, no saben la manera correcta de preparar una lonchera con verdadero valor nutricional.
El nutricionista recomendó para el niño en etapa escolar, si no desayuna en casa, llevar un emparedado, una leche de cartón, una botella de agua y una fruta, para que tenga una merienda extra, si tiene dos recreos.
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Si está en turno de la tarde y almuerza en casa, su merienda debe ser a base de frutas, no se debe incluir nada de galletas, ni dulces, ni gaseosas, además de una botella de agua y ensalada de frutas, sería otra buena opción.
La comida procesada, tipo papitas y otros aperitivos similares debe ser evitada, ya que la mala alimentación se basa en el exceso de carbohidratos, azucares simples, alimentos grasosos, entre otros.
Nota: Alberto Velarde
Fotos: Alberto Velarde/Google