“Hemos pasado de predicar en el desierto a no poder coger los telfonos”

La directora gerente de la Fundacin Ecologa y Desarrollo hace balance en el 30 aniversario de la entidad: “Unir ecologa y desarrollo fue revolucionario y ha sido la marca de la casa”

En la Fundacin Ecologa y Desarrollo fueron pioneros en todo lo relacionado con la sostenibilidad. Al fin y al cabo, hace 30 aos, no era un tema al que las empresas prestaban la debida atencin. Pese a todo, en 1992, tras la rbrica de Ro de Janeiro de la Declaracin sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de la ONU, decidieron comenzar a actuar. En marzo de ese mismo ao, un grupo de personas pertenecientes a la sociedad civil constituy ECODES y, desde entonces, no han dejado de trabajar para preservar la salud del planeta en tres direcciones: econmica, social y medioambiental.

Hoy, Mara Oria, directora gerente de la fundacin, recoge los mimbres trabajados durante tres dcadas y hace balance. “Estaban cansados de las posturas ms extremas de los activistas que slo buscaban el enfrentamiento, el hecho de que se llamase ecologa y desarrollo fue para no enfrentar ambos mundos: la unin por aquel entonces sonaba raro, fue revolucionaria y ha sido la marca de la casa”, asegura la directora dentro del ciclo Economa de Francesco, un presente ilusionante para un futuro prometedor. La iniciativa, desarrollada por la Fundacin Cultural ngel Herrera Oria, est interlocutada por Fernando Bonete, doctor en comunicacin social y director del nuevo Mster en Economa Circular y Desarrollo Sostenible de Unidad Editorial y el CEU San Pablo en colaboracin con el diario Expansin. Cada jueves y a lo largo de todo el mes de agosto, EL MUNDO publica, con carcter semanal, las entrevistas realizadas dentro del mencionado programa. La realizacin de las mismas corresponde a la Fundacin Cultural ngel Herrera Oria.

Dentro de la Fundacin Ecologa y Desarrollo trabajan de acuerdo a las normas recogidas en el Acuerdo de Pars: cambio climtico, energa y personas, ciudades sostenibles, produccin y consumo responsable, cultura para la sostenibilidad y cooperacin para el desarrollo. Ahora, gracias al papel de los organismos internacionales en tratados como el mencionado, aseguran que no dan abasto. “A lo largo de los aos hemos pasado de predicar en el desierto a no poder coger todos los telfonos”.

Sin embargo, la directora lamenta que este cambio a una mentalidad ms sostenible no pueda llevarse a cabo a la misma velocidad para todos los implicados. Si bien agradece a las instituciones el esfuerzo legislativo para implementar los cambios, recuerda que tambin influyen otros factores. “Lo ideal es empezar a trabajar con una empresa que va a crearse, porque el cambio de cultura se vuelve ms complicado cuanto ms avanza la empresa”, remarca.

Adems, Oria entiende que otro de los elementos a tener en cuenta es el tamao de las empresas cuando empiezan este proceso. “Las grandes empresas se lo creen y tienen recursos, son mastodontes y cuesta moverlos, pero se hace. El problema es la inmensa cantidad de empresas que estn en el medio que no son ni tan grandes ni tan pequeas, son las que ms alejadas estn de eso”, argumenta.

Segn la directora, uno de los elementos en los que se debe de avanzar es en la cuantificacin del valor de las empresas. Esgrime que, a da de hoy, por mucho que se intente cambiar, los directivos slo basan sus resultados en indicadores econmicos. “Tu ves algo que no sean beneficios? Los directivos estn incentivados con esos beneficios, mientras el sistema no cambie su diseo tampoco cambiar el modelo”, apuntilla.