Entre los temas que han tratado los Gobiernos de Francia y España durante su cumbre en Barcelona, ambos han acordado explorar la posibilidad de tender una conexión eléctrica que acompañe al H2Med entre los países, según ha confirmado a Reuters la ministra y vicepresidenta tercera, Teresa Ribera.
“Hemos acordado estudiar la posibilidad de utilizar el mismo camino y la misma obra pública para algunas de las interconexiones eléctricas que tenemos pendientes (con Francia)”, ha asegurado Ribera tras una cumbre bilateral. Tanto España como Francia han solicitado financiación de la Unión Europea para el proyecto.
Ribera defiende que la interconexión eléctrica es factible, pero matiza que sería necesario estudiar la ruta exacta aunque se sepa que uniría Barcelona y Marsella.
El Gobierno de Sánchez ha criticado el aislamiento energético del país de otras partes de Europa y argumenta que mejorar las conexiones con Francia ayudará a mejorar la seguridad energética de Europa y facilitará el logro de sus objetivos climáticos.
En diciembre, se trasladó que el corredor primero llamado MidCat, después BarMar y ahora H2Med, costaría unos 2.500 millones de euros, con una capacidad de 2 millones de toneladas de hidrógeno al año. Se prevé que estaría listo a finales de la década.
Así será el H2Med
El proyecto de construir un conducto submarino que conecte a España con Francia ha pasado por muchas fases. Primero, iba a llamarse MidCat; después, BarMar. Finalmente, acabará llamándose H2Med y se espera que esté listo para 2030, siendo “el primer gran corredor de hidrógeno de la Unión Europea”, según Sánchez.
Este conducto solo transportará hidrógeno verde y constará de un hidroducto que conectará Celorico da Beira (Portugal) con Zamora y otro que hará lo mismo entre Barcelona y Marsella (Francia).
Servirá para transportar el 10% de todo el hidrógeno verde que se prevé que usará la Unión Europea en 2030.