La nueva era digital. Tras la pandemia de covid-19 las nuevas tecnologías tomaron fuerza en la vida cotidiana del ser humano como también en diversos espacios de trabajo. Todo indica que en el futuro tendrán aún más impacto en todos los ámbitos, por lo que las personas y las empresas globales deberán aggiornarse a esta nueva realidad para no perderle el paso en la vanguardia. No obstante, es un proceso que conlleva aceptar, aprender a incorporar nuevas herramientas que llegaron a cambiar el rumbo digital para poder llevar a cabo tareas más desafiantes.
De eso y más se habló en el Segundo Encuentro de Transformación Digital de El País, que contó con el auspicio de Quantik, Mastercard, Universidad ORT Uruguay, Mundo Mac y Siigo Memory. Allí, varios expertos de la digitalización y ciberseguridad expusieron sus ideas sobre las nuevas tendencias y el impacto que ha tenido (tanto a nivel global y empresarial) la ciberseguridad en la era moderna.
Consultados sobre si en las empresas uruguayas se ha tomado conciencia de esta nueva “mentalidad digital”, Vera Babat, Chief Culture Officer en Abstracta Inc, expresó que no solo aquí, sino también en el resto el mundo, aún falta aceptar la posibilidad de cambio y de nuevos horizontes que brinda este fenómeno para lograr un “cambio permanente” y no estar apegados a una sola forma de ver las cosas, por lo que aún falta camino por recorrer a la hora de abrazar esta nueva era de cambios en la tecnología.
Por su parte, José Joskowicz, Ingeniero Principal en Isbel y Quantik, sostuvo que los cambios se producen en tiempos muy cortos, y que la necesidad de adaptación (tanto a nivel personal como empresarial) es fundamental. “Todo está cambiando muy rápido. La digitalización universal y la globalización de la tecnología permite ahora cosas que antes eran impensadas. Por ende, genera un nuevo paradigma al que hay que acostumbrarse y no es tan sencillo para las organizaciones acompañar ese cambio”, explicó.
En relación a ello, Esteban Téllez, Chief Revenue Officer de Siigo Memory, indicó que se deben encontrar las formas para que los empresarios (en sus diferentes frentes) entiendan que la transformación digital debe traducirse en productividad para que las empresas la adopten a su modalidad de trabajo y pierdan el miedo de enfrentarse a esta nueva era moderna que poco a poco impacta más en la sociedad. En base a estos puntos se abre una interrogante: ¿cuál es el rol que tienen las compañías en dicha transformación?
Según Joskowicz, tanto del lado de gestión humana como del tecnológico, es necesario un proceso que conlleva aprender a usar nuevas tecnologías y saber desprenderse de las dudas e interrogantes que generan al no haber sido implementadas anteriormente en estos espacios. Además, agregó que la sociedad debe entender que las tecnologías llegaron para ayudar y no para reemplazar.
De todas formas, sí cambiarán tareas rutinarias que antes eran hechas por el hombre, pero ahora existe la oportunidad de que la tecnología los apoye o tome las riendas de esas tareas para brindarle tiempo a las personas y que realicen actividades más desafiantes. Por ende, “la sociedad debe aceptar este nuevo rol que tomará la tecnología en la vida diaria, educando, enseñando y mostrando que esta herramienta ayuda al bienestar de las personas tanto en su espacio personal como profesional”, agregó el ingeniero de Isbel y Quantik.
Ciberdelitos
Kornecki manifestó que hasta el momento en Uruguay no existe una legislación como en otros países que ayude a la sociedad a tomar conciencia de la importancia de los ciberdelitos, los cuales “se tienen que tipificar”. Además, agregó que en la actualidad se encuentra protegida en la nube, y la misma se verá amenzada a futuro.
De todas formas, esto genera un desafío, ya que muchas personas pueden tenerle miedo a este cambio y a la sustitución de su rol en el trabajo. En relación a este punto, Babat cree que la tecnología sí reemplazará a muchas personas. “Sin dudas que es un tema que preocupa muchísimo en el mundo del trabajo y por ello se está abriendo una grieta muy grande entre las personas que hacen un trabajo repetitivo (ya que los mismos son fácilmente reemplazables por herramientas tecnológicas de diversa índole) y las personas que desarrollan sus habilidades centrales y humanas que pueden ser más exploradas debido a que generan un nivel de abstracción más grande”, indicó Babat.
Asimismo, Joskowicz manifestó que hoy día hay un proceso de educación hacia la digitalización, ya que existen programas de transformación laboral (a veces promocionados por el estado) para que las personas logren obtener “habilidades digitales que antes no tenían”.
En tanto, Téllez cree que las compañías tienen el deber de apoyar, motivar y luego impulsar ese acceso a la tecnología, por el simple hecho de que a corto o mediano plazo beneficiará a las pymes para que crezcan. “Así es como las empresas serán más productivas y ágiles, por ende, generarán sostenibilidad. De esta manera se verán beneficiadas por ello, y eso es lo que se busca en el mercado laboral”, sentenció Téllez.
El efecto digital en compañías
Joskowicz manifestó que todos los procesos de transformación digital en las empresas “deben tener en cuenta cómo esto impacta en sus clientes, a los cuales deben proteger, ya que hoy en día la tecnología está al alcance de todas las organizaciones, debido a que no se necesitan grandes estructuras a lo que todo se almacena en la nube”. Esto logró que la tecnología se haya universalizado y, por ende, pequeñas y medianas empresas la utilizan, como por ejemplo a través de los pedidos en línea. “Atender a los clientes vía web está al alcance de todos los negocios, sumado a que la pandemia demostró que es posible la transformación digital mediante la atención remota”, indicó Joskowicz.
Brechas en seguridad informática
Con respecto al cuestionamiento de las principales tendencias en ciberseguridad, Mercapidez estableció que las brechas de seguridad se ven en el día a día. “Los países desarrollados tienen una cadena de suministros, es decir, las organizaciones o empresas les exigen a sus proveedores que tengan buenas prácticas de seguridad que les aseguren que toda la cadena de productividad esté segura”, dijo.
“La ciberseguridad es un tema transversal, ya que nos afecta como personas, compañías y como país”, agregó.
Por su parte, Callero estableció que todos somos posibles blancos de un ataque cibernético, y que los ataques se realizan en procesos largos, que pueden llevar semanas, meses o hasta años.
Incidentes y falta de formación
Según Callero, la ciberseguridad es un problema de toda empresa u organización. “Agesic realizó varios estudios, entre los que uno de ellos llega a la conclusión de que el costo de mitigar un incidente de seguridad en una empresa es de aproximadamente US$ 50.000. Asimismo, otro estudio concluye que no se logra captar estudiantes para que se dediquen a la ciberseguridad, lo cual se convierte en un gran desafío, ya que se deben generar profesionales en este tema”, indicó. Además, con respecto a si Uruguay tiene legislación en la materia, Callero dijo que se está trabajando en ello, pero que “venimos atrasados en relación a otras partes del mundo”.
Siigo Memory
Chief Renueve Officer
“Los empresarios deben entender que la transformación digital debe traducirse en productividad para que así las empresas la logren adoptar a su modalidad de trabajo y pierdan el miedo a enfrentarse a esta nueva era moderna”.
Isbel y Quantik
Ingeniero principal
“La sociedad debe entender que las tecnologías llegaron para ayudar y no para reemplazar, pero sí cambiarán tareas rutinarias que antes eran hechas por el hombre para brindarle más tiempo al hombre para realizar tareas más desafiantes”.
Abstracta Inc.
Chief Culture Officer
“No solo en Uruguay, sino también en el resto del mundo, aún falta aceptar la posibilidad de cambio y de nuevos horizontes que brinda este fenómeno para lograr un cambio permanente en esta era de cambios tecnológicos”.
La clave de la ciberseguridad en varios ámbitos
En relación a ciberseguridad, Marcela Mercapidez, principal CEO en Sabyk, expresó que la misma es muy importante para la continuidad de los negocios y la calidad de los servicios, ya que las empresas deben proteger la información privada que tienen de sus clientes. “La ciberseguridad es una variable competitiva. Si las empresas no se actualizan, se quedarán en el camino”, agregó. A su vez, mencionó que existe una falta de conocimiento del nivel de exposición individual, ya que las nuevas generaciones pasan mucho tiempo en los espacios digitales, por lo que la seguridad es fundamental, pero no hay mucha gente capacitada para ello.
Por otro lado, Ethel Kornecki, coordinadora y docente del Diploma en Especialización en Ciberseguridad de la Facultad de Ingeniería de la Universidad ORT, dijo que desde que las personas tienen acceso a la tecnología ya tendrían que saber de ciberseguridad, por tanto, en los centros educativos se debería enseñar al respecto.
José Callero, Director de CERTuy y Agesic, dijo que la ciberseguridad incluye dos temas: la seguridad informática (que abarca lo técnico y el manejo de la información) y en segundo lugar se encuentra la ciberseguridad propiamente dicha, que es algo más técnico, la protección de la información en todos sus estados. Por ende, no es solamente un tema tecnológico, ya que la parte humana también es clave.