Saltó al césped del Tottenham Hotspur Stadium con el 49 a la espalda y Joseph encima del dorsal, pero “si puedo el año que viene me pongo Mateo Joseph“. La última sensación española en la Premier nació en España (Cantabria, 2003), empezó a jugar al fútbol en Escobedo de Camargo, compartió añada con Pablo Torre en la cantera del Racing y la pasada semana debutó con el primer equipo del Leeds en la Carabao Cup y en la Premier League. Mateo Joseph Fernández lo tiene todo para impactar. Nombre molón, pelo molón, facilidad para el gol y, sobre todo, ganas de triunfar.
“En el minuto 85 salgo a calentar y de repente me dice el entrenador “Ven, que sales”. Le miré con los ojos abiertos, me cambié rapidísimo y escuché lo que tenía que hacer cuando saliera al campo. Tenía ganas de demostrar mis capacidades, no me puse nervioso y tenía muchas ganas”, cuenta a MARCA sobre su debut en la Premier tras unos días de ensueño en los que ha dejado su tarjeta de presentación en el mayor foco mundial del fútbol.
Con la camiseta del debut a buen recaudo (“Me lo repitieron muchas veces “si debutas quédatela” y después del partido igual. La tengo conmigo y con ganas de tener muchas más camisetas”), recuerda ese primer paso sobre el césped de la Premier: “Te fijas en el estadio, que había 60.000 personas, tuve la suerte de que mis padres estaban en el campo… aunque al final la derrota hace que no sea el debut soñado”.
Jesse Marsch, técnico del Leeds y el hombre que entrenó a Haaland en los 22 partidos que le lanzaron al estrellato en el Salzburgo, le dejó un tuit cariñoso al acabar el encuentro: “Fue un detalle, es un club que mira mucho a los jóvenes, si miras las últimas temporadas han debutado muchísimos y se han quedado, estoy muy agradecido a este proyecto, al final está saliendo todo”.
Un estudioso del fútbol… y fuera del fútbol
Porque la elección del Leeds no es casual. Mateo explica cómo se gestó su salida del Espanyol y cuál fue el proceso para elegir el nuevo club en el que seguir desarrollándose: “Fue complicado porque me fui a Barcelona con 13 años sin mi familia dejando atrás muchas cosas y fue una decisión difícil, pero veíamos que no llegaba una oferta de renovación del Espanyol y nos vimos con opciones y nos llamó mucho la atención el proyecto deportivo del Leeds, que era increíble. Veíamos al Leeds, que debutaban muchos chavales y se quedaban en el equipo y por eso nos quedamos aquí”.
Analítico en su futuro y en su presente, estudia sus entrenamientos, sus puntos fuertes y débiles en sus partidos y aún saca tiempo para la carrera en la que se ha matriculado: “Voy a entrenar por la mañana, cuando acabo hago las cosas de la universidad, estoy estudiando business management y también veo muchos vídeos de los entrenos y de los partidos para ver qué hago bien y mejorar”.
Es una liga de filiales en la que compites contra jugadores de tu edad. Permite desarrollar mejor a los jugadores de nuestra edad, es una gran idea
“Es un cambio que se nota, tengo la suerte de que la familia de mi padre es de Inglaterra y con el idioma no he tenido complicación, desde pequeño me han hablado inglés y eso me quita un peso de encima. Y el club además es muy familiar, tanto los trabajadores del club como los compañeros me acogieron y me cuidaron, y los del primer equipo también”, dice de su adaptación a Inglaterra. Mateo ha caído de pie en un club que vive la fiebre española, con Joel Robles, Marc Roca, Diego Llorente y Rodrigo Moreno: “Es una ayuda, son muy buena gente tanto los españoles como los demás, me ha ayudado todo el mundo bastante”.
También ayuda a su desarrollo, cuenta, la organización de las categorías inferiores en Inglaterra. A diferencia del fútbol español, donde se lanza a los chavales a competir con gente de (bastante) más edad y experiencia, la Premier tiene otro estilo: “Es una liga de filiales en la que compites contra jugadores de tu edad. Permite desarrollar mejor a los jugadores de nuestra edad, es una gran idea, juegas contra grandes equipos”. Este curso lleva once goles en ocho partidos en esa Premier League 2 y otro en el EFL Trophy, doce tantos oficiales sumados al que marcó en pretemporada con el primer equipo ante el Blackpool. Un inicio de curso impactante que le ha valido la llamada de Marsch: “Desde que acabó la pasada temporada sabía que ésta era muy importante, tanto para devolver la confianza depositada en mí en enero como para mí personalmente. Estoy muy contento porque se está viendo todo el trabajo que vengo haciendo y tengo muchas ganas de seguir mejorando”.
Respaldado por un equipo de análisis, nutrición y consejos
No sólo la competición es diferente en Inglaterra, también en los entrenamientos se ha encontrado con una exigencia distinta a la de sus clubes españoles: “Aquí es un poco más físico, la metodología de los entrenos es más física, te exigen mucho y en España era más técnica. He notado un poco de diferencia ahí, pero no lo he encontrado difícil porque lo sabía y estuve trabajando para ello”. Con esa mezcla anglohispana, tanto en la sangre como en la formación, se está gestando un ‘9’ de quilates: “Soy un delantero rápido, potente, me gusta ir al espacio. No tengo problemas en venir a recibir o caer a banda, pero me gusta ir al espacio y demostrar mi velocidad. Me queda mucho por mejorar, incluso en las cosas que se me dan bien, y tengo muchas ganas de trabajar y seguir creciendo”.
El parón del Mundial le servirá para darse cuenta de lo logrado, porque “es difícil de asimilar, he tenido la suerte de debutar en Copa y en Premier League y es algo que sueñas desde pequeño, esto es por todo el trabajo que llevo haciendo desde que soy pequeño”, pero también para seguir su proceso contante de análisis y mejora: “Tengo un buen equipo detrás, tanto de análisis como de nutrición y lo voy a aprovechar este tiempo para mejorar”.
Y cuenta, además, con la mejor de las ayudas. Por mucho cuerpo técnico, mucho cuerpo analítico y mucha (buena) gente que esté pendiente de él, nadie cuida de un chaval de 19 años como lo hace ella: “Me fui a vivir con mi madre a Inglaterra y me ha ayudado mucho en el tema nutrición… y para vivir más tranquilo“.