Comer o no comer carne, esa es la cuestión. Muchos consideran que ser vegetariano es cuestión de una moda, pero lo que es cierto es que el vegetarianismo es una forma de vida y de entender el planeta de una forma más sostenible. Este 1 de octubre de 2022, se celebra el Día Mundial del Vegetarianismo, una buena fecha para conocer más sobre esta corriente social.
En España, cada vez son más las personas que renuncian a comer carne. En 2021, el 1,5% de la población adulta española era vegetariana; el 0,8%, vegana y el 10,8%, flexitariana. Según apuntan los datos aportados por la Unión Vegetariana Española.
El número de locales del sector hostelero vegetarianos o veganos también han aumentado en los últimos años. A principios de siglo era una odisea encontrar un restaurante en el que solo se sirviera comida vegetariana y en el que no hubiera presencia de carne. En 2021, se contabilizaron alrededor de 331 bares o restaurantes españoles dedicados a la gastronomía vegetariana. Asimismo, en el territorio nacional hay 28 establecimientos de comida rápida vegetariana, 23 pastelerías y panaderías y 16 heladerías, en las que los alimentos de procedencia animal no se encuentran a la carta.
¿Qué come un vegetariano?
La dieta de una persona vegetariana se basa fundamentalmente en vegetales, hortalizas, frutas y frutos secos, legumbres, granos o semillas, es decir, aquello que no contenga proteína animal, aunque hay quien sí consume huevos y lácteos (lactoovovegetarianos) y quien incluye en su menú alguna proteína animal como el pescado, el pollo o los mariscos (semivegetarianos).
Vegetariano o vegano, ¿en qué se diferencian?
Tanto los veganos como los vegetarianos comparten los alimentos vegetales como parte esencial de su dieta. La principal diferencia entre veganos y vegetarianos es que los primeros no consumen nada que proceda de los animales, ningún tipo de producto ni derivado.
La mayoría de los vegetarianos sí consumen leche, yogures, huevos o derivados de estos e incluso algunas proteínas animales, exceptuando siempre la carne roja.
El impacto en el planeta y en el cuerpo de dejar de comer carne
El consumo de carne sí tiene una impronta en el medio ambiente. La producción a través de macrogranjas emite altas cantidades de gases de efecto invernadero. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), las emisiones del sector ganadero representan el 14,5% del total de emisiones.
Dejar de comer carne reduciría este impacto medioambiental, además de que se matarían menos animales y no existiría una sobreproducción cárnica.
A nivel de salud, en el momento de tomar la decisión de dejar de comer proteína animal, es recomendable acudir al médico para revisar el estado de salud de cada uno y lo que se necesita en la nueva dieta. La ingesta excesiva de carne, sobre todo roja y procesada, favorece la aparición de cáncer, por lo que se recomienda consumir tres veces por semana y mejor carne blanca.
Si en la dieta se elimina la carne por completo, hay que buscar proteínas vegetales que suplan ese déficit de proteína animal porque el cuerpo necesita proteína para el funcionamiento de músculos o el crecimiento del pelo y las uñas.
Día mundial del vegetarianismo, ¿por qué se celebra el 1 de octubre?
El 1 de octubre fue escogido como el Día Mundial del Vegetarianismo por la Sociedad Vegetariana de Norteamérica en 1977. Al año siguiente, esta fecha fue ratificada por la Unión Vegetariana Internacional. Esta iniciativa se creó para expandir la conciencia sobre el respeto animal y los beneficios de la alimentación basada en vegetales.
El mes de octubre se considera como el mes de la conciencia vegetariana y culmina el 1 de noviembre con la celebración del Día Internacional del Veganismo.