El primer libro será siempre un reto, tanto para el autor como para el lector. Es algo así como lanzarse a la piscina y no saber muy bien cuán fría está el agua. Con Rommel Manosalvas, seguramente, esto es lo que esté pasando por estos días, pues tras haberse dado a conocer en el panorama literario de su país con algunos cuentos que fueron incluidos en antologías y aparecieron en revistas culturales de nicho, ha publicado su primera novela de la mano del grupo Planeta, a través de su sello Seix Barral.
El título es Anatomía transparente y es la historia de un despertar sexual. Es, según el periodista Damián De La Torre, la narración de la pérdida de la inocencia, de los juegos primigenios prohibidos, de la homosexualidad reprochada. “El lector está al frente de una ópera prima escrita con un bisturí capaz de estremecer a la fibra más ínfima de su propia anatomía”.
En este texto epistolar, reza la contraportada del libro, escrito con el lenguaje de quien ha perdido la esperanza, el sexo es el corazón de las rupturas de una familia quiteña disfuncional, la semilla del desamparo pero también de la ternura y la entrega.
“Muerdo una manzana y la carne se vuelve roja. Mis encías sangran. Los zancudos me pican las piernas de noche. ¿A dónde va mi sangre en las membranas diáfanas de las moscas? Me siento incómodo y me rasco hasta que la montaña se vuelve púrpura y sangra y gotea sobre el suelo, y yo me unto mentol como si tuviera cinco años. A veces quisiera tener cinco años. Me como las uñas, me arranco pedazos de los labios, me hurgo la nariz, me arranco cabellos que en el suelo forman grietas. Anoche soñé con un cuerpo-larva que me caminaba sobre la piel” – (fragmento).
Desde la primera página de esta novela el lector sabe que Samuel se ha quitado la vida. Desde entonces, Irene, su madre, busca las razones del suicidio de su hijo en los manuscritos que él dejó precisamente para que ella los encuentre. Con la lectura desordenada de esas cartas Irene reconstruye la imagen del cuerpo enfermo de su hijo, un cuerpo que prefiere la muerte antes de atestiguar su propio deterioro. Manosalvas hace evidentes los abismos que nos separan y los traumas que nos unen a quienes amamos, los secretos que solo en la escritura pueden ser nombrados.
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“Manosalvas propone la dureza que implica el enfrentarse al pasado, a aquellos secretos de familia que resultan más dolorosos que la propia muerte”, señala De La Torre. “Un desafío frente a la ausencia del padre, quien será una sombra que persigue hasta reflejarse en los ojos del ser amado, en la mirada de Gabriel que muestra al amor como un pesado bloque que hace rechinar los huesos”.
Son 184 páginas en las que el cuerpo y el espacio comulgan a la luz de las mismas dinámicas. El cuerpo de Samuel se desmorona, así como todo lo que yace a su alrededor, y el lector se pregunta a qué grado de descomposición está la sociedad, sus ideales, el curso de las democracias en un tiempo incierto, como lo son todos, pero este un poco más. “La ciudad, en la novela, es una suerte de reflejo de lo que le pasa a Samuel. Es una ciudad oscura, caótica, fragmentada. Es una cuestión de duplicidad: traspasar lo que pasa en el cuerpo de Samuel a la casa, y de la casa a la ciudad”, le ha dicho el autor a Óscar Molina, en una conversación para Diario Critero.
Esta es, apunta la editorial, una fascinante novela epistolar llena de ternura, entrega, amor y muerte. Entretanto, el escritor Leonardo Valencia ha dicho que la prosa de Manosalvas es de una “alta visibilidad, inesperada, empática e irónica”. Una pluma que sorprende hoy con la publicación de su primer libro y que, probablemente, sea tema de conversación con lo que haga de aquí en adelante.
SOBRE EL AUTOR:
Rommel Manosalvas (Quito, Ecuador, 1992)
Escritor y arquitecto. En 2019 su cuento “Disforia” fue antologado en el libro “Los que vendrán 20 20″. Su ensayo “Victor Hugo y las redes sociales” quedó finalista en el concurso sobre arquitectura moderna “Miradas plurales y diversas” y se publicó en la editorial del CAE. En 2020 su cuento “Abuelita” ganó el II Mundial de Escritura entre 5.402 participantes de 42 países, y la traducción al inglés fue publicada en The Yale Review a mediados del 2021. Cursa una maestría en literatura y escritura creativa en la UASB.
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