Una. Esa es la cantidad de mujeres CEO en las 100 grandes empresas tecnológicas, según la lista Forbes. Se trata de Julie Sweet, que dirige Accenture desde septiembre de 2019. “Cuando miramos arriba y buscamos a las personas que se sitúan en posiciones de liderazgo, apenas hay mujeres. Y sin mujeres jefas en las profesiones digitales, va a ser muy difícil motivar a las generaciones más jóvenes a elegir itinerarios que les conduzcan a una profesión digital”, lamentó este martes la consultora de Economía Aplicada de Analistas Financieros Internacionales (Afi) Verónica López, durante la presentación del estudio de ClosinGap El coste de oportunidad de la brecha de género en las profesiones digitales.
El informe, elaborado por Telefónica en colaboración con Afi, concluye que potenciar el acceso de las mujeres a las profesiones digitales aportaría más de 71.700 millones de euros de riqueza al conjunto de la sociedad española en 30 años, cifra que equivale al 6,4% del PIB de 2021. “Si no hay un incremento sustantivo de las mujeres en el mercado laboral en estas ocupaciones digitales, no seremos capaces como sociedad de dar respuesta a la creciente demanda de estos puestos de trabajo en los próximos años”, destacó López.
En el análisis del mercado laboral, el informe apunta que el crecimiento de los puestos de trabajo digitales será del 2,9% anual, por lo que la demanda alcanzará los 2,9 millones de empleos en 2053. Al mismo tiempo, el número de personas ocupadas en profesiones digitales en España crecerá a un ritmo anual del 1,3%, lo que supone un total de 1,8 millones de profesionales en ese periodo de tiempo. De esta forma, la diferencia entre la cantidad de personas ocupadas y los puestos de trabajo digitales en tres décadas supondrá un déficit de talento digital de 1,1 millones de perfiles profesionales en el país.
Para evitarlo, ClosinGap asegura que basta con cerrar la brecha de género del sector. Actualmente, por cada hombre ocupado en profesiones digitales solo hay 0,34 mujeres, pero el clúster calcula que esta proporción debería crecer a un ritmo anual del 5,1%. Así, se alcanzaría el equilibrio entre la oferta y la demanda en el mercado laboral digital en 2053, un dato que resaltó la presidenta de ClosinGap, Marieta Jiménez. “Renunciar a que las mujeres sean también protagonistas en el avance de la transformación digital sería un coste de oportunidad que no deberíamos estar dispuestos a asumir como sociedad”, advirtió.
El informe señala que el camino a seguir para acabar con esta brecha de género pasa por trabajar la educación para la igualdad y fomentar el ejercicio de la corresponsabilidad desde la escuela. En cuanto al plano laboral, indica que es necesario implantar una agenda de diversidad e inclusión en las organizaciones para garantizar que los entornos de trabajo incentiven la incorporación de las mujeres en posiciones digitalmente sofisticadas o avanzadas. “No es un tema de capacidades ni de falta de esfuerzo, es un tema absolutamente cultural”, criticó la directora global de sostenibilidad de Telefónica, Elena Valderrábano, quien aseguró que “es responsabilidad de las empresas fomentar estas vocaciones en las niñas desde el principio”.
De hecho, el estudio confirma que la ausencia femenina en estas disciplinas se reproduce en todas las etapas educativas. En Formación Profesional (FP), por ejemplo, las mujeres representan el 22,1% del alumnado, frente al 45% que personifican en titulaciones no digitales. En la universidad representan el 63% de las matriculaciones y muestran mejor desempeño académico (con una tasa de finalización de estudios del 17,2% para ellas, frente al 14,4% de ellos). Sin embargo, su presencia es minoritaria en las carreras universitarias de intensidad digital (35%), a pesar de que también muestran mejor desempeño académico que ellos (27,4% para ellas, frente al 18,1% para ellos).
Teniendo en cuenta que las titulaciones universitarias digitales presentan mayor empleabilidad que el resto (78,9%, frente al 71,2% de las no digitales), esta desigualdad deriva en una menor presencia femenina en el mercado laboral general. Por eso, las expertas insistieron en la importancia de visibilizar a las que, como Julie Sweet, ocupan estos puestos para que las futuras generaciones entiendan que existe esa opción.