La objetividad absoluta no existe. Uno no puede separar su condición de ciudadano de sus estructuras estéticas, éticas y políticas del contenido de la pieza periodística.
Por PhD. Luis Fernando Gutiérrez Cano y Mag. Luis Jorge Orcasitas Pacheco*
En esta entrega se abordará el género que se considera de gran relevancia para estructura de la programación abierta generalista: el noticiero. En esta ocasión realizamos una entrevista a Fernando Humberto Cifuentes, periodista y el director del noticiero Hora 13 Noticias, informativo que se emite en el canal regional Teleantioquia de lunes a viernes al mediodía.
Este espacio informativo se destaca por ser uno de los noticieros más vistos dentro la televisión regional colombiana. Con Cifuentes abordaremos aspectos como la agenda informativa, la objetividad, el valor de la información, el informativo dentro de la televisión pública, entre otros temas. Fernando se define como un periodista por vocación, padre por bendición. Los medios, la política, los derechos humanos están siempre en su conversación y Hora13 Noticias de Teleantioquia es su medio.
A propósito de las agendas que establecen los noticieros audiovisuales y los temas que se incluyen en dichas agendas (también los que se excluyen), como director de un noticiero regional, ¿qué criterios lo llevan a escoger unas determinadas noticias para en la una continuidad del informativo? ¿Qué tanto influye el rating en su configuración?
Cuando yo comencé como director hace año y medio, lo primero que le dije al equipo de trabajo y a la junta directiva era que yo no iba a dirigir “Cifuentes noticias”, yo iba a dirigir Hora 13 Noticias que tiene una línea editorial establecida desde hace más de 30 años. Esa línea editorial se ha caracterizado por tener un claro enfoque regional, ese es nuestro foco de interés y el de nuestros usuarios.
En tal sentido, la proximidad es un criterio muy importante, por eso nuestra capacidad está enfocada en entregar información valiosa para la gente del Valle de Aburrá, de Antioquia y de sus subregiones; de lo que sucede en su entorno y que está incidiendo directamente con su vida. En nuestro objetivo de hacer un periodismo objetivo prevalecen los temas de mayor interés público y que tienen que ver con las necesidades de las personas, es decir, de nuestros televidentes. Por último, se debe tener en cuenta que la televisión tiene esa característica de impacto, aquello que televisivamente se pueda presentar de la mejor manera.
Siendo así, uno empieza a ver qué es lo más importante de Antioquia, de todos esos temas, cuáles son aquellos que afectan más a nuestras comunidades y, por último, con cuál de esos temas puedo desplegar una narrativa audiovisual mucho más potente y atractiva. Esos son los 3 criterios básicos, también hay otras limitantes como el tiempo, el espacio o los recursos, que a veces impiden que un tema llegue a la agenda o hacen que llegue de manera distinta a como uno lo hubiera pensado.
¿Existe objetividad absoluta y en Hora 13 Noticias cómo es ese asunto de la objetividad?
En este aspecto, es importante subrayar que la objetividad absoluta no existe. Uno no puede separar su condición de ciudadano de sus estructuras estéticas, éticas y políticas del contenido de la pieza periodística. Yo sé que los humanos no tenemos esa capacidad de disección, por lo que uno entra en todo momento a intervenir o como dirán algunos científicos sociales “a contaminar el objeto”. Pero esa no es la preocupación en Hora 13, porque cuando nosotros nos referimos a objetividad, estamos hablando de un valor que está íntimamente relacionado con la independencia y con la capacidad de entregar la información desde todos los ángulos posibles. Dar voces y permitir que la mayoría de las partes interesadas en un asunto participen en ese diálogo con críticas y observaciones.
A partir de esa premisa, quiero indicar que nada del periodismo es absoluto, todo es relativo y siempre hay una posibilidad de construcción, especialmente cuando usted se acerca a un hecho con independencia desde cualquier punto de vista temático con amplitud y diversidad; ahí es factible una construcción mucho más objetiva. Se plantea la objetividad como una meta, aunque no nos obsesiona.
¿Qué valor le dan ustedes a la información que transmiten y qué buscan con ella?
Considero que el objetivo fundamental de un informativo es permitirle al ciudadano tomar decisiones informadas. Nosotros creemos que la información hace parte del acervo que lleva al ciudadano a tomar decisiones y que a través de una información de calidad es como se forma ciudadanía y se toman decisiones de mayor valor para la sociedad. Como equipo de periodistas, esa es nuestra convicción y eso es lo que nos motiva: suponer y aspirar a que nuestra información contribuya a que los ciudadanos tomen mejores decisiones.
En el escenario de un canal regional y público como Teleantioquia, en donde existen intereses políticos y económicos, como director ¿se ha encontrado con alguna situación de censura?
Por encima de todo, quiero contextualizar: Hora 13 es un espacio informativo realizado por una empresa privada que se emite por Teleantioquia a través de una licitación. Este espacio se entrega por medio de un concurso público de méritos (una licitación) con todo lo que eso implica desde lo legal y jurídico. Hora 13 y la empresa que lo produce que se llama Quanta Telecomunicaciones, llevan ganándose la licitación del espacio de la 1:00 p.m. por 28 años consecutivos. De hecho, creo que fue por eso por lo que Teleantioquia sacó a licitación esos espacios informativos, para poderle garantizar a las empresas esa independencia que les da tener un contrato ganado por licitación. Este contrato contempla producir un noticiero de calidad con unos elevados criterios técnicos, periodísticos y legales.
Yo, antes de ser el director del noticiero, era el encargado de trabajar en el ámbito de la política, mal haría yo en decir que a mí alguien algún día me llamó y me dijo: “Saca esto, quita aquello y pon esto”. Los agentes directivos del canal tienen la claridad que el noticiero no hace parte de Teleantioquia, razón por la cual no ha habido ningún momento o incidente de alguien que llame o se moleste en absoluto. Lo que sí atendemos todo el tiempo son requerimientos de los ciudadanos, estos llaman y escriben: “Ustedes por qué hicieron esto, por qué sacaron aquello y no sacaron lo otro”. Este diálogo es necesario, bien recibido y natural en una sociedad democrática.
En resumen, nosotros afortunadamente tenemos libertad de expresión y se nos garantiza el derecho a la libertad de prensa. Claro, con todas las condiciones de responsabilidad que la Constitución colombiana establece. Respetamos el buen nombre, la presunción de inocencia y el debido proceso; pero eso es responsabilidad de la información, no censura ni tampoco presión sobre el medio de comunicación.
Bajo su dirección ¿cómo está estructurando Hora 13 Noticias las diversas fuentes que se deben cubrir y cómo se han organizado en lo relacionado con el manejo de las fuentes en el ámbito regional?
Uno de los cambios que establecí en mi llegada fue dejar de cubrir por instituciones y empezar a cubrir por temática. Nosotros no cubrimos Alcaldía, cubrimos ciudad. La Alcaldía de Medellín es una voz dentro de las dinámicas de ciudad, muy importante y decisiva, pero es una voz solamente, lo que pasa en la ciudad no se puede limitar solo a lo que pasa en el ente municipal. Ese cambio nos ha permitido ampliar el rango de voces, el rango temático y ampliar la agenda; porque está claro, que cuando se hace el cubrimiento periodístico de una institución quien tiene la agenda es la propia institución y el ente tiende a imponerla. Tener la mirada un poco más amplia e integral de los temas que hacen parte de la realidad nos ha permitido extender esa agenda temática.
¿Cómo manejan el asunto de las subregiones teniendo en cuenta la extensión y las dificultades geográficas del departamento?
Una de las tareas de la dirección del informativo fue establecer una serie de alianzas entre canales locales en los territorios y Hora 13. Nosotros como empresa privada no tenemos cómo sustentar una red de corresponsales que implicaría tener una persona en cada uno de los 125 municipios del departamento, y en una geografía tan compleja como la de Antioquia; además, una persona por subregión no daría abasto (el departamento de Antioquia tiene nueve subregiones). En ese sentido, hemos optado por las alianzas con canales locales.
Aun así, los cambios que ha traído la digitalización de la información son impresionantes y han posibilitado el surgimiento de un montón de canales pequeños, locales y comunitarios en los territorios. Esos canales se convierten en nuestros corresponsales en las regiones. ¿Qué hacemos? Obviamente con el respeto y el reconocimiento por el derecho de autor, ellos nos entregan material y nosotros a cambio les damos soporte en transferencia de conocimiento: capacitaciones, asesorías, apoyo logístico y además compartimos contenidos de nosotros para ellos. Tenemos una red de diez canales aliados, la idea es incrementarla y llevarla a otros espacios.
Algo que se preguntan muchos telespectadores: la rutina de un noticiero. ¿Qué pasa en el día a día y cómo hacen para romper rutinas que a veces vuelven a los medios tan esquemáticos?
Nosotros estamos en pleno proceso de convergencia, de ser una empresa periodística que hace un contenido para una ventana que se llama Teleantioquia a la 1:00 pm a pasar a tener múltiples ventanas y una verdadera plataforma en lo digital, por eso tenemos nuestro sitio web y redes sociales.
Todas estas dinámicas que voy a mencionar van a cambiar; la primera y más importante es el consejo de redacción, todos los días a las siete de la mañana. Cuando uno tiene una emisión al día entonces hace un consejo diario, pero cuando usted tiene una plataforma digital que no tiene horas ni fechas en el calendario, el consejo de redacción se convierte en un espacio de interacción a lo largo del día. El consejo de redacción es el espacio de discusión de la agenda, los temas, los enfoques más importantes y las posibles fuentes.
Posteriormente, los periodistas van a hacer el trabajo de reportería durante la mañana; adicionalmente, el periodista regresa a la redacción a editar sus informes. El problema es que nosotros tenemos solo cuatro salas de edición para diez periodistas, no pueden editar todos al tiempo. La parte más difícil de la dirección es ese trabajo logístico: ¿A quién ponemos en qué?, de manera que nadie quede recargado y que todos consigan desarrollar los temas a lo largo de la mañana y no solo en media hora. Luego de que el periodista sale y hace la reportería, regresa y escribe; hay un proceso de revisión qué hacemos la subdirectora y yo, luego se pasa a edición.
Como director, después del consejo de redacción desarrollo la continuidad, en la que se establecen nombres de las notas periodísticas y tiempos calculados. Otro criterio que se establece desde la dirección es ¿qué tiempo le doy a una determinada nota? El tiempo depende de muchos factores como importancia, orden, cantidad de contenido y tiempo total disponible; porque a veces tenemos 15 minutos de pauta comercial y eso nos limita. Paralelamente a ese proceso viene la tarea de redactar los titulares, en donde los periodistas sugieren titulares, se evalúan, se cambian o se aprueban. Ahí, se debe ser muy respetuoso con las propuestas de los periodistas, pero también se tiene en cuenta el estilo de la dirección. Mientras los periodistas están haciendo reportería la dinámica de la dirección de enfoca en la redacción de los libretos para los presentadores.
Seguidamente, hay un proceso adicional que es la emisión del noticiero. Yo al principio coordinaba la emisión personalmente desde el máster, después decidí que fuera la subdirectora, Yolanda Bedoya, quien también tiene una amplia experiencia y es reportera de mil batallas. Yo desde la oficina en el barrio Laureles puedo tener comunicación con la subdirectora, con los periodistas, las salas de edición y con el jefe de producción. En cambio, en Teleantioquia solo tengo comunicación con el equipo de producción del canal y quedo aislado del resto del equipo, entonces prefiero quedarme y desde la dirección se trata de coordinar todos los asuntos periodísticos.
Lo siguiente es ¿cómo no caer en la rutina? Tal vez ese sea el gran problema del periodismo diario: ¿Cómo evitar cubrir siempre lo mismo y que sea igual todos los días? La única medida es la voluntad. La dinámica periodística es totalmente absorbente y te lleva a la rutina, el periodista tiene que interponerse y tomar decisiones: mientras los demás están haciendo el noticiero, un director debe estar “hurgando”, buscando y mirando para proponer un tema nuevo, para incluir temas diferentes en la agenda. Pero eso es decisión, si el periodista se “rutiniza” nadie se da cuenta, el noticiero sale y nadie va a decir “qué noticiero tan rutinario”, no. El periodista es quien se da cuenta y es el que debe oponerse a esa absorción de la rutina del noticiero.
Como periodista de vasta experiencia y reconocida trayectoria, ¿qué tipo de recomendaciones daría a las nuevas generaciones de periodistas que se encuentran en una época compleja y de constante transformación?
Como reportero a mí me sirvieron muchísimo las clases de ciencias sociales que recibí la universidad. Fueron muy útiles los conocimientos que la academia me entregó en áreas como la psicología, sociología, antropología, ciencias políticas y economía, entre otras. Esas clases son el paracaídas del periodista, cuando llega el problema y uno se enfrenta a situaciones como la pandemia de Covid-19, ahí es bien importante abrir ese paracaídas y, el haber estudiado un poquito de sociología, la estructura social, política y económica, permitió entender lo que la sociedad y el mundo globalizado estaba viviendo.
Por eso, la mejor recomendación se centra en que todo periodista debe leer, leer intensamente si no, no tiene ese paracaídas. No tiene sentido que uno no entienda, por ejemplo, de filosofía, la filosofía mueve el mundo, esta se encuentra detrás de las posturas políticas de un Estado, detrás del pensamiento humano; son cosas que se tienen que entender.
Finalmente, el periodista debe ser un consumidor de medios. Yo no entiendo un periodista o alguien que estudie comunicación o periodismo que diga que no le gustan los noticieros. Uno cuando estudia periodismo estudia de todo y lee de todo, consume medios de comunicación masivamente; yo veo todos los noticieros, oigo radio todo el tiempo. Todo el día estamos conectados con la noticia, hoy en día es incluso mucho más fácil con los distintos recursos tecnológicos.
En síntesis, el periodista debe estar en las conversaciones, tiene que haber participado como ciudadano de ellas. Esas son las recomendaciones básicas: estar bien informado, ser muy capacitado y leer intensamente.
* PhD. Luis Fernando Gutiérrez Cano y Mag. Luis Jorge Orcasitas Pacheco, son docentes e investigadores de la Universidad Pontificia Bolivariana sede Medellín, en el pregrado y posgrado la Facultad de Comunicación Social-Periodismo. En esta edición cuentan con el apoyo de la estudiante Valentina Herazo Benítez.