El CEO de YPF Luz, Martín Mandarano, consideró que el gas es el “complemento justo” de las energías renovables para compensar la intermitencia de esas tecnologías y asegurar el menor impacto ambiental con valor agregado, mayor eficiencia y competitividad para el sector industrial.
La compañía creada en 2013 es hoy la de mayor participación en el Mercado a Término de Energía Eléctrica de Fuente Renovable (Mater), con casi el 40% del total.
Además, ocupa el segundo lugar en generación de renovables y el cuarto en el ranking de los productores de energía eléctrica de todas las fuentes.
En una entrevista con Télam, Mandarano analizó que el Mater permitirá atender toda la demanda de los clientes industriales, pero que para cumplir los objetivos de generación al 2025 será necesario definir nuevos mecanismos para contractualizar el crecimiento del residencial. A continuación los principales tramos del reportaje:
-Mandarano, ¿el Mater va a ser el vector de desarrollo excluyente de las renovables en los próximos años?
-Desde el comienzo de YPF Luz en 2013, apuntamos siempre en energía renovable al mercado de privados y al mercado industrial. Hoy lideramos ese mercado con 39% de participación porque es el camino para garantizar nuestro crecimiento y a partir de ahí empezamos a desarrollar proyectos que sean cada día más eficientes. Entendíamos que en algún momento el mercado iba a ser más competitivo como es hoy, con muchos que jugaron en el Plan Renovar y ahora se están viniendo al Mater.
Dentro de nuestro ADN buscamos el beneficio del cliente a partir de nuestra cadena de valor de producción. Si logramos un proceso eficiente desde la construcción a la operación y logramos un precio competitivo hacemos competitiva la industria y al país, eso genera más trabajo, más valor agregado y eso genera mayor bienestar al conjunto de la Argentina. Por eso apuntamos a la industria, con una visión integral en el Mater que es y seguirá siendo el foco.
-Habla de eficiencia, ¿qué tan competitiva es la energía renovable en la Argentina?
-La industria se está volcando a este tipo de energía para cambiar su matriz energética y porque es competitivo el precio. Hemos logrado convertir los recursos naturales en riqueza a partir de un valor económico competitivo, porque hoy el mercado si compra a Cammesa tiene precios de entre 85 y 100 dólares, y los mercados de tecnologías renovables están en 60 o 65 dólares con lo cual hay un ahorro. Entonces en eso también hay un beneficio para la industria.
Los parques eólicos Los Teros, Manantiales Berh y Cañadón León.
-Al sector le falta todavía la famosa estabilidad de suministro…
-La intermitencia es un tema para a resolver. Desde el punto de vista del suministro de energía es eficiente, con lo cual pensamos que el vector que complementa a la renovable es el gas natural. La Argentina tiene reserva por más de 150 años de un gas natural que puede producirse eficientemente y es el complemento justo para compensar esa intermitencia con el menor impacto al medio ambiente y el mejor beneficio para el cliente, pensando en que en algún momento el mundo va a poner a una regulación de CO2, con lo cual el producto que salga de Argentina debe tener una componente de CO2 (dióxido de carbono) baja.
Nuestra nuestra matriz de oferta tiene esa visión: una complementariedad de bajo impacto ambiental, de alto valor para el cliente que le garantice el total de la operación y eso es el gas y la renovable. Hoy si fuéramos 100% renovables, no podríamos abastecer la demanda de la industria durante todo el tiempo, con lo cual, el concepto es estratégico y la posición nuestra es un 20% renovables, 80% de térmico, siempre con gas natural porque es el vector de la transición el que permite complementar.
-¿Es necesario que el Estado retome un rol activo de tomador de energía o la industria ya se puede manejar sola?
-Para las industrias no es necesario la intervención del Estado. La industria es eficiente comprando y nosotros somos eficientes para la producción. El tema que hay que terminar de resolver es qué pasa con la demanda domiciliaria porque ahí hoy no se puede contractualizar y alguien tiene que tomar el rol de la contractualización para cumplir el porcentaje (del 20% de generación de renovables para el 2025) porque el porcentaje de la demanda industrial es mayor que el que fija la ley. Lo estamos viendo: hay compañías que contratan 100% de su demanda y sobre la demanda total estamos entre un 12 un 13% de abastecimiento con renovables, incluso debajo del 16% que dice la ley. Lo que está faltando es algo de la demanda residencial, que tiene un peso importante en la matriz. Ahí hay dos alternativas o las distribuidoras salen a contractualizar con la oferta del privado o que se vuelva a hacer algún plan Renovar -con algún nuevo modelo porque tuvo algunas deficiencias- para la demanda residencial porque sino la industria va a sobrecumplir y va a faltar una parte.
“Tenemos muy buenos vientos, muy buen sol, somos eficientes construyendo parques pero no tenemos donde subirlo, no tenemos la infraestructura de transporte eléctrico”.
-Los generadores siempre hablan de las limitaciones por financiación e infraestructura. ¿Cuál condiciona más un proyecto?
-Pareciera que debería ser al revés, pero el tema financiero uno puede mirar que incluso en los mercados locales hemos tenido buenos financiamientos para nuestros proyectos con lo cual, eso es positivo. El mundo también está muy abierto para desarrollo de este tipo de energías renovables. El gran tema y el gran desafío en Argentina es la transmisión, la infraestructura, que es el mismo problema que tiene Vaca Muerta y lo está solucionando muy bien con el gasoducto nuevo para convertir una reserva o un recurso en riqueza.
En nuestro caso, en energía renovable, es lo mismo. Tenemos muy buenos vientos, muy buen sol, somos eficientes construyendo parques pero no tenemos donde subirlo, no tenemos la infraestructura de transporte eléctrico y entonces que viabilizar eso como un tema de Estado, porque ante el cuello de botella en vez de utilizar el mejor lugar del recurso para hacer un parque eólico o un parque solar, vas a buscar a donde hay capacidad de transporte y tal vez no sea lo más eficiente del punto de vista de recursos.
Un nuevo parque eólico en Córdoba y el primero solar en San Juan
YPF Luz cumplirá en 2023 su décimo aniversario y buscará incrementar su oferta de generación eléctrica con un conjunto de proyectos que se encuentran en marcha, entre los que se destacan un nuevo parque eólico en Córdoba, su primer parque solar en San Juan y dar los primeros pasos en el desarrollo del hidrógeno verde.
La compañía cuenta con una capacidad instalada de 2.384 MW, que suministra al mercado mayorista e industrial. También provee soluciones de generación eléctrica con energía térmica, energía renovable, cogeneración y energía distribuida.
Sus activos se encuentran en seis provincias, en las que opera ocho centrales térmicas y tres parques eólicos. A esto se suma la construcción de su primer parque solar, el Zonda, en San Juan.
“Nuestro objetivo es seguir creciendo porque hay mucho potencial para la demanda industrial en la que podemos colaborar. Y en ese sentido tenemos previsto para los primeros diez años de la compañía completar las obras de El Zonda, que tenemos en construcción en San Juan, y un proyecto eólico en la zona del sur de Córdoba”, dijo el Ceo de YPF Luz, Martín Mandarano.
El primer parque solar de YPF tendrá una potencia inicial de 100 MW equivalente al consumo de 140 mil hogares, con una inversión inicial superior a los 90 millones de dólares.
El proyecto general prevé etapa posteriores que se conocen como El Zona II, III y Tocota, que permitirían alcanzar 500 MW de potencia, que estarán orientados al Mercado a Término de Energía Eléctrica de Fuente Renovable (Mater) y al sistema de distribución general, que requieren de capacidad de transporte disponible.
En el caso del parque eólico General Levalle, en el sur de la provincia de Córdoba, prevé una primera etapa de 65Mw para la cual está en proceso de licitación del equipamiento, cerrando los primeros contratos y a la espera de ganar más capacidad de despacho. General Levalle será el cuarto parque eólico de YPF Luz, luego del de Manantiales Behr, en Chubut; Cañadón León, en Santa Cruz; y Los Teros, en el partido bonaerense de Azul.
“Desde ya seguimos viendo proyectos de eólica en provincia de Buenos Aires, en Santa Cruz también en Buenos Aires para el Mater y, sin dudas, para más adelante tenemos en cartera y en estudio en análisis la producción de hidrógeno verde a partir de energía renovable, en Chubut y Santa Cruz también”, señaló Mandarano.
Para el directivo de la generadora eléctrica, “el hidrógeno verde es hoy un proceso de desarrollo de investigación, porque lo que se conoce hasta hoy involucra una cadena de valor muy cara que , creemos, no es la que va a terminar predominando hasta que se logre resolver el problema el transporte”.
“En sí -continuó- tenemos que estar preparados porque creemos que por ahí para el 2030 eso estará resuelto y para eso tenemos que haber estudiado, conocer las tecnologías, saber cómo desarrollar parques en escala para hacerlos eficientes para competir con el mundo en escala”.
En ese sentido, hoy la tarea a encarar “es buscar recursos, hacer mediciones, terrenos en cercanías a puertos y dar escala a los parques eólicos. En eso hay que estar muy enfocados sobre la zona de la costa de Santa Cruz y Chubut”.
El minado de criptomonedas en Vaca Muerta
La generadora eléctrica YPF Luz desarrolló en Vaca Muerta un proyecto piloto de generación eléctrica a partir del gas residual o de venteo (flare) de la producción de hidrocarburos, para abastecer el minado de criptomonedas que desde la misma formación realiza un cliente internacional.
Esta primera experiencia comenzó hace tres meses en el área Loma Campana, el bloque icónico y fundacional del aprovechamiento de los recursos no convencionales en Vaca Muerta, que explotan para la producción de petróleo las empresas YPF y la estadounidense Chevrón.
Mandarano explicó que “este primer piloto que ya está funcionando opera con 1Mw de generación y en simultáneo se está desarrollando un segundo proyecto para entrar en funcionamiento antes de fin de año, de unos 8 Mw, en el área Bajo del Toro” que también pertenece a YPF.
“Empezamos a desarrollar este piloto de generación para minado de criptomonedas con una visión de sustentabilidad y de negocio a partir del gas natural de flare, que no se puede aprovechar cuando se está haciendo la exploración y al principio de la producción de un yacimiento de petróleo”, explicó Mandarano.
Se trata de la etapa inicial de un desarrollo hidrocarburífero durante el cual el petróleo viene asociado con gas natural, el cual no cuenta con las facilidades para capturarlo y llevarlo a un gasoducto, por lo que no se lo puede aprovechar con el obvio impacto ambiental que eso tiene.
A partir de esa situación, YPF Luz advirtió “la posibilidad de convertir en valor agregado ese desecho, al final del día -porque el gas que va al flare se quema- con un aprovechamiento para la generación de energía eléctrica mediante la instalación de moto generadores al pie del yacimiento”.
Esos cliente se instalan en el desierto de Vaca Muerta con equipos informáticos montados en contenedores y de alta demanda eléctrica, en proximidad de los generadores y de los pozos de producción de hidrocarburos, para lo cual se firman contratos de provisión.
“Ellos hacen el minado de criptomoneda y nos pagan la energía que les vendemos a veces atada al precio del blockchain o a veces a precio fijo para su procesamiento de datos global”, detalló el directivo. “Una vez completado el pozo y ya en producción de petróleo y gas, los equipos de generación y de minado se retirarán hacia otro pozo en inicio de desarrollo, porque se trata de equipos modulares y de fácil transporte”, señaló.
“Lo que estamos haciendo es atípico porque es llevar la demanda a donde está la oferta, en este caso en Vaca Muerta, cuando normalmente la oferta está en otro lado a cientos o miles de kilómetros para lo cual se requiere construir transmisión que es justamente uno de los problemas de infraestructura“, completó Mandarano.