Fotografía: Carolina Echagüe M.
A días de su apertura, Kervin Ramírez, dueño de Dreams Café, busca conquistar los más exigentes paladares cafeteros de Concepción. Para ello, apostó por el desarrollo de dos conceptos: calidad y buen servicio, los que son aderezados con una cálida atención, cualidad que comparten otros dos negocios de migrantes en la ciudad.
Al llegar al recinto de calle San Martín, casi al llegar a Paicaví, es posible observar a Kervin generalmente en el acceso, recibiendo y orientando a sus clientes.
“Tenía el sueño de abrir una cafetería donde poder combinar el emprendimiento con un café de calidad”, expresó el dueño de nacionalidad venezolana y que se encuentra en el país desde hace ya 9 años.
Actualmente, ofrece un café de origen colombiano y “puntuados desde 85 hacia arriba” con dos tipos de tostados medio y alto.
La segunda etapa del proyecto indicó Ramírez, incluye un segundo piso donde la idea es habilitar un espacio de coworks basado en la colaboratividad junto con la realización de algunas actividades como catas de café entre otros.
Requerido acerca de la experiencia de emprender en Concepción, el dueño del nuevo establecimiento señaló que lo más difícil fue la etapa de construcción, ya que debido la actual inflación estaba todo bastante caro.
En cuanto a las expectativas del negocio, Kervin Ramírez espera recuperar la inversión en un plazo de 6 meses aproximadamente y aumentar los puestos de trabajo que ofrece hoy que son tres.
“Casa Turca”
Mehmet Ali Girgin, dueño del local Casa Turca de calle O´Higgins 1154 es originario de Estambul, es importador y exportador de productos turcos exclusivos desde hace 13 años en Chile.
Según señaló Mehmet, fueron las solicitudes de productos desde la zona sur de Chile lo que lo motivó a llegar hasta el centro penquista. ”Nos instalamos en Concepción porque hay muchos pedidos del sur”, comentó.
Respecto de qué ha sido lo más difícil al iniciar su negocio en la ciudad, el inversionista turco manifestó que “la economía ha estado mala y el tema de la burocracia ha afectado especialmente a los extranjeros, particularmente después de la pandemia, ya que atrasó algunos trámites”.
Girgin espera abrir otros locales y continuar generando empleo en la comuna donde comenta que la clave ha sido poner el énfasis en un genuino interés por el bienestar de sus clientes más que en el crecimiento del negocio. “Cliente bien, yo bien”, explicó entre su idioma natal y su español avanzado.
“La Dinastía del Sabor”
Katiuska Contreras, dueña de “La Dinastía del sabor” en Lincoyán 764, dijo haber iniciado su negocio de venta de empanas como las preparan en su país, Venezuela, impulsada por su familia. “Mis hijos me motivaron para buscar la forma de obtener ingresos tras los efectos de la pandemia”, afirmó.
Tras un año y cuatro meses de operaciones, Contreras recuerda que lo que más le costó al inicio, fue implementar el sistema de delivery debido a las cuarentenas.
En cuanto a sus proyecciones, estas son positivas. “Tengo fe en que vamos a seguir creciendo, ya que abrí hace tres meses otro local también en Concepción”, concluyó.