Otro tema de conversación ocurrió cuando ‘The New York Post’, en junio de 2020, criticó al actor por lucir una ‘barriga de papá’ en su programa de Netflix ‘Down to Earth’, luego de lucir una musculatura perfecta por años.
El cuerpo marcado y musculoso de Zac Efron se vio en su mayor esplendor en la película ‘Baywatch’ de 2017, donde interpreta a Matt Brody, un campeón olímpico que por su comportamiento rebelde es asignado a un grupo de salvavidas.
Ahora el actor ha hablado sobre la dificultad y sacrificios que tuvo que hacer para lograr esa musculatura y cómo, a pesar de lucir como un estándar de belleza perfecto, fue malo para su salud.
Zac Efron sufrió por tener un cuerpo musculoso en ‘Baywatch’
En un fragmento de una entrevista con la revista ‘Men’s Health’ publicado el 7 de septiembre de 2022, Zac Efron confesó que para tener la musculatura de ‘Baywatch’ el entrenamiento requería una dieta estricta y diuréticos potentes.
“El look de Baywatch, no creo que sea en verdad obtenible. Hay muy poca agua en la piel. Es falso; se ve como si fuera de CGI. Y eso requiere de Lasix, poderosos diuréticos, para lograrse. Así que no necesito eso (para su nueva película). Prefiero tener algo extra, como 2 o 3% de grasa corporal”.
Además de los diuréticos y rigurosos entrenamientos, que empezaba a las 4 de la mañana, Efron comentó que también tuvo una dieta estricta y casi vegana para tener muchas proteínas en su comida.
Zac Efron no volvería a tener la musculatura de ‘Baywatch’
Tanto sacrificio y las extremas rutinas de ejercicios acabaron por cobrarle factura al actor, pues confesó que en ese entonces su salud empeoró, tuvo insomnio y hasta depresión.
“Empecé a desarrollar insomnio y caí en una depresión bastante mala durante mucho tiempo. Algo en esa experiencia me quemó. Me costó mucho volver a centrarme”.
El actor de 34 años dijo que seis meses después de que filmó la película y cuando dejó de entrenar tan duro, comenzó a sentirse mejor y decidió tomarse un breve descanso de la actuación.
En ese entonces Efron comenzó a reflexionar sobre su físico y la salud mental, lo cual lo ha llevado a decidir no volver a ponerse bajo otro demandante entrenamiento y aceptar su cuerpo con un poco de grasa corporal.
Aunque también aceptó que una vida entrenando y comiendo salubable le ha generado hábitos y hecho que su cuerpo se acostumbre, por lo que lo mejor para él ha sido encontrar un equilibro y simplemente no entrenar en exceso.
“(Pensé) ¿Cómo sería no tener que estar en forma todo el tiempo? ¿Qué pasa si solo digo, ‘al diablo’ y me dejo llevar? Así que lo probé, y tuve éxito. Y por todas las razones por las que pensé que sería increíble, me sentí miserable. Mi cuerpo no se sentiría saludable; simplemente no me sentía vivo. Me sentía atascado y lento. Realmente me he tomado el tiempo para concentrarme en la autorrealización y tratar de encontrar mi ritmo”.