¿Ha presentado episodios eufóricos, falta de sueño, pérdida del apetito, picos de energía, atención enfocada a una persona, comportamientos orientados al logro, motivación, tendencia a mirar a alguien como único y aumento de la sensación, si esta es adversa? Entonces, según un estudio del departamento de Psiquiatría de la Universidad de Pisa, usted ha padecido de enamoramiento. “Es casi patológico”, dice el médico neurólogo Diego Rosselli Cock, que estará hablando del tema hoy en el Parque Explora, con la experta en juguetes sexuales Luisa Fernanda del Pilar Montoya y el gambiólogo Julyán Conde, a las 7:00 de la noche.
Las ciencias se han ocupado de entender los fenómenos naturales y los relacionados con los comportamientos sociales del hombre, y el amor es ambos. Se manifiesta médica y biológicamente, y sus diferentes etapas se producen en sociedad, incluso han cambiado el curso de la historia, como la adversa pasión del príncipe troyano Paris por la hermosa Helena de Esparta, que terminó con la épica guerra que Homero narra en La Iliada, entre cuyas consecuencias está la fundación de Roma. Si Paris no se hubiera enamorado de Helena, no habría caballo de madera ni Rómulo o Remo. Según Rosselli, y los estudiosos del tema, entre más adverso sea el amor al principio, más intenso y duradero será, “por eso el amor adolescente es tan fuerte”, explica.
Corazones rotos
Ahora, qué puede desencadenar tales sentimientos en primer lugar. “El papel del olfato en la atracción inicial es crucial, así que oler bien y estar limpio es una buena idea, también ayudarse de un perfume con el problema de que los mismos perfumes no le gustan a todo el mundo. Para eso también sirven las flores y los chocolates”, afirma Rosselli. Sin embargo, advierte que la ciencia no ha llegado a perfeccionar una fórmula para el enamoramiento.
Lo que sí se sabe es que tiene cuatro etapas y se puede dar varias veces, es decir, se puede amar a varias personas al mismo tiempo. La primera es la atracción, necesaria para seguir subiendo de nivel. Luego viene el enamoramiento, que es la más intensa y, según el estudio de la Universidad de Pisa, solo llegan a durar hasta 18 meses. Luego, viene la consolidación de amor, con su “luna de miel”, explica Rosselli, y finalmente este sentimiento se modifica y evoluciona, durando tanto como la pareja lo quiera, pero con la claridad de que no es igual al que los juntó por primera vez.
Aunque el sexo juega un papel importante en la atracción y posterior creación de la intimidad, este no tiene relación directa con el amor. “Hay sexo sin amor, autoerotismo y también relaciones sexuales que pueden generar sensaciones displacenteras, como las no consentidas, pero sí es un mecanismo que construye parejas perdurables en el tiempo”, afirma el experto.
Si bien la ciencia se ha ocupado de estudiar cada uno de estos aspectos a profundidad y desde diferentes ángulos, está en deuda con el estudio de la “tusa”, que puede llegar a tener consecuencias tan graves como la muerte, uno de los temas que se van a tratar en el conversatorio de Explora. “Es indudable que la pérdida de un ser querido baja las defensas y favorece la aparición de enfermedades, que pueden tener consecuencias mortales”. ¿Cómo curarlo? Hasta ahora, la única respuesta es “el tiempo”.
