¿Deberían prohibirse los remates o despejes de cabeza en el fútbol cuando los jugadores son niños? La IFAB, organización internacional encargada de definir las reglas de este deporte, ha respaldado la decisión de algunos países, como Inglaterra o Colombia, de prohibir estos toques de balón en las categorías más jóvenes para prevenir enfermedades degenerativas. Varios estudios concluyen que los futbolistas tienen más posibilidades de padecer demencia. En España, de momento, no se ha planteado esta prohibición, tal y como confirma la Federación Aragonesa de Fútbol.
El debate ha cogido fuerza en los últimos meses a nivel internacional tras la publicación de varios estudios. Uno de los más destacados es el llevado a cabo por la Universidad de Glasgow en 2019, que concluía que los futbolistas tienen más del triple de posibilidades de padecer demencia y contraer enfermedades neurodegenerativas, en un futuro, que una persona que no practique este deporte.
Desde la Federación Aragonesa de Fútbol explican que, hasta el momento, ni la federación española ni la FIFA, han dado ninguna orden concreta al respecto. “Si alguna de estas entidades nos recomendara o nos impusiera directamente la normativa, la acataríamos sin problema porque esa es nuestra labor. Somos una federación territorial y nos debemos a ello”, explican estas fuentes, que aseguran no disponer de suficiente información para poder valorarlo.
“Es un tema que se lleva valorando a nivel internacional desde hace bastante tiempo. Se ha estudiado limitar el peso de los balones o incluso colocar protección en la cabeza a los niños, aunque la decisión no se tomará a corto plazo”, explica Luis García Melchor, jefe de los Servicios Médicos de la Federación Aragonesa de Fútbol y experto en Medicina Deportiva.
Los riesgos en los niños
“El riesgo a la hora de recibir un golpe en la cabeza es infinitamente mayor en un niño que en un adulto porque todavía no se ha desarrollado del todo ni a nivel craneal ni neurológicamente”, explica García Melchor. El facultativo recuerda que ya existen estudios sobre el tema, pero ninguno centrado en niños. Tampoco hay ninguno que relacione directamente la demencia y los problemas cerebrales con esta práctica en concreto. Sin embargo, detalla que hasta los 12 o 13 años, “los niños todavía no han cerrado las suturas del cráneo”. “Los huesos no están completamente formados, están unidos por un cartílago y todavía se están calcificando, por eso cualquier traumatismo sobre esa zona puede ser peligroso”, señala.
Algunas escuelas de fútbol aragonesas consultadas aseguran que tampoco tienen información suficiente para valorarlo, pero recuerdan algunas de las medidas ya implementadas en el deporte infantil, como balones de menor tamaño y peso o la técnica de utilizar más la frente para estos golpes de balón. El director de la Escuela de Fútbol Base del Bajo Aragón-Caspe, Carlos Burillo -que cuenta actualmente con 170 jóvenes futbolistas- afirma que los balones utilizados en estos partidos son “cada vez mejores”. Este recuerda que en las categorías benjamín, alevín e infantil utilizan otro tipo de balón acorde a su fisonomía. “Los entrenadores suelen guiar a los niños para que sepan controlar el balón. Para rematar, les enseñamos una técnica en la que se utiliza más la frente que la parte superior de la cabeza, es una zona más dura y es menos peligroso”, concluye Burillo.
Desde la escuela del Alcañiz C.F. -que cuenta con unos 250 niños- califican como “bastante extraña” la decisión de prohibir los remates de cabeza en los más jóvenes. “Llevamos 40 años haciendo eso, no ha habido nunca ningún problema… Aunque si viésemos un informe que dijese lo contrario, lógicamente tomaríamos las medidas oportunas”, explica el presidente del club turolense, Miguel Ángel Domingo.