Durante la Cumbre del Clima-Cop21, celebrada en Pars en 2015, los pases miembro de la Organizacin de las Naciones Unidas firmaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible, un conjunto de compromisos y metas para garantizar las necesidades del presente sin comprometer a las futuras generaciones.
Este plan se vio reforzado con la activacin de la llamada Agenda 2030, que puso de manifiesto que estos compromisos solo podran ser logrados si gobiernos y sector privado ponan todo su esfuerzo en promover una economa de transicin hacia las bajas emisiones, a la vez que se presta especial atencin a los objetivos de justicia social; y ello sin olvidar al tercer vector en esta partida: el conjunto de la sociedad.
Dentro de las mltiples iniciativas legislativas dentro del amplio marco de “la sostenibilidad” entendida no solo como aquellas cuestiones que ms ahondan en temas ambientales, sino tambin sociales o de buen gobierno, debemos atender a la reciente aprobacin por el Congreso de los Diputados de la figura de las Sociedades de Beneficio e Inters Comn -conocidas como sociedades BIC o Benefit Corporation en otras jurisdicciones- dentro de la Ley Crea y Crece remitida al Senado para continuar el trmite parlamentario.
Este tipo de sociedades de capital, con su natural nimo de lucro, busca adems de forma activa generar un impacto positivo en el medioambiente y la sociedad, comprometindose estatuariamente a alcanzar los ms altos estndares en materia medioambiental, social y de buen gobierno corporativo a travs de “la generacin explcita de impacto positivo en las personas y el medio ambiente” en el ejercicio de su actividad, considerando “a todos los grupos de inters en sus decisiones”. Para ello, se someteran a “mayores niveles de transparencia”, quedando sujetas a “verificacin externa” a fin de garantizar su desempeo en “los mencionados objetivos sociales, econmicos y ambientales”, as como a la rendicin de cuentas en los trminos que prevea la futura Ley.
Si bien el nimo de lucro aleja a estas sociedades de otras entidades de carcter no lucrativo, como por ejemplo las fundaciones de la Ley 50/2002, de 26 de diciembre, o las asociaciones, eso no quiere decir que estas nuevas entidades entren en confrontacin con este otro grupo, sino que, al contrario, podrn contribuir a la mejora del crecimiento econmico del pas y a los fines fundacionales de las organizaciones del Tercer Sector. Por otro lado, las Sociedades BIC tambin tienen alguna connotacin que las diferencia de otras entidades de capital: en las sociedades que buscan como fin ltimo el beneficio y el reparto de dividendos para maximizar la inversin realizada por el socio, la estrategia mira, bsicamente, el valor econmico, mientras que las BIC deben incorporar a dicho valor la bsqueda de un impacto positivo en la sociedad y en el medioambiente al integrarlo en su objeto social y en sus estatutos. Lo que, a su vez, implica otra diferencia con la responsabilidad social corporativa que de forma voluntaria integran las empresas en su sistema de gobierno.
Esta obligacin ir ms all del modelo de autorregulacin que existe hasta ahora, donde las entidades pueden vincularse con determinados objetivos ambientales y sociales y/o asumir determinados estndares de gobernanza que desborde el marco legal pero sin que exista una norma que les obligue a su cumplimiento, y es que la propuesta establece como una de las caractersticas de estas entidades, junto con la publicacin de sus avances, el reconocimiento externo mediante la correspondiente verificacin por un tercero independiente en trminos similares a como tenemos actualmente respecto al Estado de Informacin no Financiera. Verificacin que va ms all de una simple certificacin privada, y que, en nuestra opinin, dar mayor credibilidad frente a las actuales prcticas de green or social washing existentes.
Pues bien, esta iniciativa legislativa otorga todo su protagonismo al sector empresarial. El propsito de las empresas, con independencia del sector econmico en el que desarrolle su actividad, o de su tamao, tanto en lo que al nmero de empleados o volumen de facturacin se refiere, debe ser colaborar con sus grupos de inters de forma sostenible en materias como el cuidado del medioambiente y consideraciones sociales.
Por todo ello, estamos seguros de que se abre un nuevo espectro de oportunidades, situando al sector privado como un acelerador del cambio en cuestiones relativas a la sostenibilidad social y ambiental, dando respuesta a muchas de las demandas de la sociedad actual, si bien, no exentas de mltiples retos.