La española Andrea Pereira sabe lo que es llegar a la cima contra viento y marea. Cuando era niña, a esta joven de 28 años le diagnosticaron diabetes tipo 1 y le informaron de que tendría que inyectarse insulina después de cada comida durante el resto de su vida.
Aunque había jugadoras profesionales diabéticas, el conocimiento era limitado, y su ritual habitual diferenciaba a la joven Pereira de sus compañeras. Sin embargo, con el apoyo de su familia, su autodisciplina la ha convertido en campeona de la UEFA Women’s Champions League y en pentacampeona de la liga nacional española con el Atlético de Madrid y el Barcelona.
La EURO Femenina de la UEFA 2022 es el segundo Campeonato de Europa de la defensora, y las expectativas son altas en la concentración española.
Aquí, Pereira nos hace un recorrido por su viaje desde el diagnóstico hasta la vida como modelo para otros afectados, lo que la ha llevado a escribir un libro que detalla sus experiencias.
Andrea Pereira sobre… el momento de conocer que era diabética
Fue en verano y yo tenía 11 o 12 años. Fue un verano extraño porque se estaban produciendo muchos cambios como consecuencia de la pubertad y la adolescencia; pensábamos que no era más que eso.
Con el tiempo, fueron apareciendo más problemas y tuve que ir al médico, que me dijo que tenía diabetes tipo 1.
El único tratamiento es la insulina. Te la inyectas después de cada comida. Eso fue lo más inusual o extraño para mí. A los 12 años, cuando te dicen que tienes que pincharte, te dicen que seas disciplinada, que hay ciertos alimentos que no puedes comer, te cambia mucho, pero yo lo tomé como algo natural, algo que tenía que superar.
Cuando tenía unos 16 o 17 años, cuando mi carrera futbolística empezó a alcanzar el nivel de profesional, mi médico me dijo que tenía que cuidarme más porque, si no lo hacía, los efectos adversos de la diabetes acabarían manifestándose antes de lo normal. A partir de ese momento, cambié mucho mi mentalidad y empecé a cuidarme mucho más. Empecé a mejorar mi forma de hacer las cosas porque quería jugar al fútbol. Hice todo lo posible para seguir jugando.
Andrea Pereira sobre… el apoyo familiar
Supongo que mis padres veían el diagnóstico de forma diferente porque sabían más sobre el tema, pero yo era solo una niña, así que no sabía realmente lo que me pasaba con mi enfermedad. Lo veía como una parte natural de mí. Ahora que tengo diabetes desde hace muchos años, todavía estoy aprendiendo sobre ella, pero la llevo bastante bien.
Mis padres, más que nadie, fueron los que siempre estuvieron ahí. Cuando la noticia llegó a mi escuela, me apoyaron mucho, se preocuparon mucho por mí. Nunca he tenido ningún problema de apoyo. Estoy muy agradecida a todo el mundo porque siempre me tratan muy bien.
Andrea Pereira sobre… vivir una experiencia diferente los días de partido
Cuando está a punto de empezar un partido, todo el mundo piensa en el partido, ¿no? Yo tengo que pensar en el partido y en mis niveles de glucosa, si me he inyectado la insulina, si necesito inyectarme más, si tengo que reducir el número de inyecciones o si tengo que ponerme más. Puede hacer que te olvides del juego, pero llevo años haciéndolo y lo afronto con total naturalidad. Forma parte de mi vida.
El deporte hace que los niveles de glucosa desciendan durante las horas siguientes a un partido, así que después de cada partido los mido con un sensor y, dependiendo de mis niveles de glucosa, comeré allí mismo o esperaré hasta que mis niveles de glucosa bajen un poco. Mis niveles de glucosa pueden aumentar bastante debido a los nervios del partido, así que tengo que mantenerlos bajo control.
El sensor que utilizo (se ve arriba, en su brazo en la foto principal) ha salido al mercado recientemente y supone un cambio de rumbo para los diabéticos, porque puedes enviar tus niveles de azúcar en sangre directamente a tu teléfono móvil a través de Bluetooth. Puedes controlar tus niveles de glucosa las 24 horas del día sin tener que pincharte la mano con una aguja, que era como teníamos que hacerlo antes. Es un gran invento para todos los diabéticos.
Andrea Pereira sobre… cómo reaccionaría su yo más joven al ver a una jugadora internacional diabética
Me hubiera gustado ver a alguien con este sensor cuando me enteré de que era diabética. Te puede ayudar y motivar para seguir adelante.
Me habría motivado mucho porque me habría dado la confianza de que puedo lograr mis objetivos, incluso siendo diabética. Es muy útil que sea tan visible. Puedes experimentar, de primera mano, que una jugadora diabética lleva una vida más o menos normal.
La diabetes es una enfermedad silenciosa. Si no la conoces, es muy difícil entenderla. Pero para aquellos que son diabéticos, será muy útil ver que una persona diabética es capaz de ser una jugadora de fútbol profesional. Es importante para esos niños y niñas, y, sobre todo, para sus padres, ya que les ayuda a motivarles.
Andrea Pereira sobre… los consejos para las más jóvenes
En las redes sociales me escriben muchos padres con hijos diabéticos o, a veces, los propios niños y niñas diabéticas. A veces, los clubes los abandonan, o tienen problemas en la escuela o con el fútbol.
Así que el hecho de haberlo tenido tan fácil a lo largo de toda mi carrera futbolística (todos los clubes en los que he estado me han apoyado mucho) me hace sentir muy privilegiada. No todas las niñas y niños diabéticos tienen experiencias tan positivas, así que me gustaría ser un ejemplo que demuestre que todo es posible, sobre todo para la gente que no quiere que haya niños y niñas diabéticos en sus equipos, para que aprendan a asumir la responsabilidad de una enfermedad que se puede controlar fácilmente.
Los equipos, los clubes y las escuelas piensan que la responsabilidad de cuidar a una niña o un niño diabético significa que tienen que quedarse con ellos. Por eso, acaban por no quererlos o no quieren la responsabilidad, pero en realidad, la propia persona diabética tiene la mayor parte de la responsabilidad. Es necesario que las familias, la propia persona diabética y todos los que la rodean compartan más información.
Andrea Pereira sobre… representar a su país
El fútbol femenino en España está creciendo. Tenemos un gran grupo de personas y todas ellas pueden ser un modelo a seguir en muchos ámbitos diferentes.
Representar a España con este grupo de increíbles jugadoras es genial, pero al mismo tiempo es una gran responsabilidad. Estamos dispuestos a asumirla y haremos todo lo posible para que España esté contenta con nosotras.