El Mundial de Catar 2022 está a la vuelta de la esquina. 32 selecciones buscan un único puesto para alcanzar el título mundialista y los vetos en un territorio árabe se hacen presentes en especial en temas de sexualidad, y en cuanto a la comunidad LGTBI castigando el solo hecho de salir a las calles con la bandera de este mismo.
De acuerdo con el portavoz de la cita orbital, el solo hecho de usar la bandera LGTBI será arrestado por siete u once años. Manteniendo que se deben respetar la religión, creencias y cultura islámica. A su vez, no solo estará prohibido mostrar signos de esta comunidad, sino tampoco afecto entre mismo sexo, dado que en el país catarí la homosexualidad es un acto ilegal. Esto siendo un mensaje a todos los aficionados que atiendan al Mundial en el mes de noviembre y diciembre.
Otros vetos son graves consecuencias a quienes tengan relaciones sexuales fuera del matrimonio con el torneo vigente. El Daily Star mantuvo que aquel hecho tiene una pena de siete años de cárcel. Esta decisión insólita de prohibir señales de la comunidad LGTBI, ha sido criticada por algunas selecciones que atenderán al Mundial, una de ellas España.
Íñigo Errejón, portavoz de la formación de izquierda Más País, pidió el martes 28 de junio que el combinado nacional utilice en sus dorsales y su uniforme, colores del arcoíris en señal de protesta por la ley del país árabe. Errejón fue directo y comentó, ‘esto es una ofensa para los países en los que están vigentes esas libertades’.
Esta decisión es una señal de respeto por parte del combinado español hacia el colectivo y desean que por lo menos en el primer partido utilicen colores de la comunidad LGTBI. Es una manera de hacer uso de la libertad española, el problema recae en hacerlo en un país desconocido para ellos y atados en esa estadía en Catar bajo el gobierno catarí y las normas del país asiático.