Desde antes de la pandemia del Covid-19, que llevó a una crisis económica y sanitaria en el 2020, los países de América Latina registraron un retroceso en ciertos aspectos del bienestar, como desempleo, subempleo, suicidio, entre otros temas, indicó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
“El fin del boom de los precios de las materias primas coincidió con un periodo de estancamiento o retroceso en muchos aspectos de las condiciones materiales, la calidad de vida y los recursos de sostenibilidad”, dijo en videoconferencia Katherine Scrivens, del Centro de Bienestar, Inclusión, Sostenibilidad e Igualdad de Oportunidades de la OCDE.
En este sentido, los aspectos que se vieron afectados fueron la pobreza, los homicidios, la cobertura sanitaria universal, así como la proporción de jóvenes empleados en el sector informal.
“No sólo hay diferencias entre países, sino que también dentro de ellos existen grandes disparidades”, agregó antes de exponer que una de las desigualdades son de género ya que, aunque existen avances de los resultados del bienestar de las mujeres en las últimas dos décadas, las brechas continúan.
La situación podría empeorar con la invasión de Rusia a Ucrania, en un contexto en donde la pandemia del Covid-19 continúa siendo una de las principales incertidumbres para las economías a nivel global.
En este sentido, expuso que la crisis sanitaria y económica ha afectado, como en varias ocasiones se ha señalado, a las poblaciones más vulnerables, como a las mujeres, población en situación de calle, familias de menores ingresos, infantes y jóvenes, así como aquellos que viven en zonas rurales o con un bajo nivel educativo.