Fotografía: Isidoro Valenzuela M.
Por: Pablo Carrasco Pérez
Estamos en una crisis vial, dicen las autoridades, y así lo viven a diario miles de personas en las zonas urbanas del Gran Concepción y Los Ángeles. Como de las crisis surgen oportunidades, el uso de la bicicleta ha pasado de ser una moda a un modo de transporte que gana adeptos y que pese al frío y la lluvia que por estas fechas se dejan sentir, se alza como una alternativa concreta de movilización para un segmento de la comunidad.
El propio ministerio de Transporte, en voz del subsecretario Cristobal Pineda, quien visitó Concepción la semana que termina, planteó que a la presente administración le interesa potenciar “otros modos” de transporte como parte de las medidas para enfrentar la congestión por vehículos motorizados y que en ese espacio, la bicicleta es una opción más que viable.
Estado del Arte
Pero ¿existe suficiente infraestructura para el uso de la bicicleta en nuestras comunas? La respuesta es no, pero se avanza. Según datos de la Seremi de Vivienda, que es uno de los principales actores en el desarrollo de las ciclovías, en la Región existen 99 kilómetros construidos y en operación. Además se están construyendo actualmente otros 6,7 kilómetros en las comunas de Talcahuano, Concepción, Tomé y San Pedro de la Paz en los proyectos Par Vial Collao-Novoa, Corredor de Transporte Público Talcahuano – Etapa 3, Espacio Público Dichato Coliumo y Pedro Aguirre Cerda.
Y hay proyectado comenzar a construir 14,45 kilómetros dentro del presente año. Así Lebu sumarán 6,5 km en un proyecto de ciclovías; Mulchén otros 6,65 km, también en un proyecto de ciclovías y en Hualpén, 1,3 km inserto en el proyecto de Corredor de Transporte Público-etapa 4. Sumado a ello, está en diseño el desarrollo de 6,91 kms en la ciudad de Los Ángeles, estudio que finaliza este año.
Pero también hay otro par de kilómetros de ciclovías que están asociados a proyectos de infraestructura que ha desarrollado el Ministerio de Obras Públicas, que si bien no construye ciclovías, sí ha podido incorporarlas dentro de las licitaciones de proyectos como la Ampliación de la Costanera a Chiguayante con 3,6 km; Puente Llacolén con 2 km; Puente Bicentenario 1,5 km y el futuro Puente Industrial, en etepa de construcción que adicionará otros 2,5 km. Además del tramo existente en la Costanera de Concepción entre el Cementerio al Puente Bicentenario; en avenida Jorge Alessandri desde el Mall del Trébol hasta el Aeropuerto Carriel Sur y los 21 km que se construyen hoy en la denominada Ruta Nahuelbuta en la provincia de Biobío.
Uso de las ciclovías
Entonces, es razonable pensar si toda esta inversión pública tiene uso y la respuesta desde la autoridad de Vivienda es que sí, y cada vez más, pese a que la pandemia golpeó también a este modo de transporte, debido a las restricciones de movilidad impuestas, las cifras vuelven a mostrar que hay un grupo de la población que usa “la cleta”.
Según los datos de la seremi del ramo, las ciclovías más usadas están en Concepción en particular las del eje Roosevelt, O’Higgins y Manuel Rodríguez. El conteo dice que en la ciclovía Roosevelt se generan en promedio 1.900 viajes diarios, mientras que en Manuel Rodriguez hay 1.100 y O’Higgins aporta otros 900. En tanto, el contador más reciente corresponde al eje Alemparte (camino Los Carros) el que ya ha superado la barrera de los 600 viajes diarios.
“Esto demuestra que las ciclovías son importantes para las personas, ofrecen muchas ventajas, partiendo porque son una alternativa real al transporte público y privado, colaboran con el cuidado del medioambiente y permiten un ahorro en los costos de bencina o transporte público”, señaló Claudia Toledo, seremi de Vivienda.
Pedaleando
Para Leonardo Peña, coordinador y voluntario de Taller Comunitario “Pedal Autónomo”, que reúne a una veintena de entusiastas promotores del uso de la bicicleta, hay aún una serie de barreras que limitan el uso de este medio de transporte y, a su juicio, el clima es el último de los factores.
“Lo primero que piensa la gente es en la barrera del clima, pero hay que mirar los modelos de desarrollo de otros países, como los nórdicos, sobre todo Canadá, Estados Unidos, donde cae nieve y donde sí han impulsado la bicicleta y la gente se sube a ella de todos modos. Entonces, hay un tema cultural, creo que es una de las últimas barreras a superar el tema del clima. Primero logremos que la gente use las bicicletas y ver qué barreras existen que hacen que la gente no las utilice, y a mi juicio son principalmente de infraestructura, sensación de seguridad y problemas de conectividad con la infraestructura ya existente”, sostuvo.
Peña va más allá en su reflexión y plantea lo mismo que han señalado las propias autoridades para enfrentar la crisis actual, el impulsar los distintos modos de transporte de manera equitativa y complementaria. Es decir, que sean las personas las que decidan qué opciones va a usar y no esten obligada a tener solo una.
“Entonces, en términos funcionales, pensando en todos los efectos negativos que tienen los modelos de transporte dominante hoy en día, sí o sí hay que transformar la cultura de la movilidad. Hablamos de que los vehículos generan ruidos, generan contaminación, los costos también son prohibitivos para la gente de menos recursos. Entonces, sí o sí, hay que dinamizar e impulsar otros tipos de modos. Igual creo que hay impulsar muy, muy fuerte el transporte público, pero tiene que ir de la mano con otras alternativas como la movilidad activa (caminar) y la bicicleta”, planteó.
Coordinar y favorecer
En esa línea, la propia seremi de Vivienda, Claudia Toledo, añadió que durante los próximos cuatro años el trabajo en este ámbito estará centrado en la conexión de las infraestructura existente para lograr tener una red y no sólo proyectos aislados, aprovechando el desarrollo de las vías exclusivas para el transporte público.
“Una decisión de nuestra administración es avanzar en la conexión de la red de Corredores de Transporte Público, eso implica que también avanzaremos en más ciclovías que son parte de estas obras, con estándares de calidad y seguridad, aportando alternativas reales para que sean muchos y muchas los que alejan dejar el auto en casa y desplazarse por otros medios por la ciudad y, sin duda, pedalear la ciudad es una excelente decisión”, afirmó la autoridad.
Algo que es compartido desde el municipio de Concepción, desde donde se está trabajando un “Plan Comunal de Inversión en Espacios Públicos y Movilidad” y desde donde se solicitará la ampliación de la infraestructura para las bicicletas.
“En el enfoque de potenciar medios de transporte, el municipio penquista enfatiza la necesidad de potenciar la bicicleta y en esa línea reitera la necesidad no sólo de extender las ciclovías existentes, sino también de conectarlas entre sí al interior de la comuna y en una red intercomunal desde Talcahuano, pasando Hualpén, Concepción y Chiguayante”, se indicó.
Finalmente, uno de los temas que comienza surgir con fuerza es cómo favorecer realmente a este tipo de medio de transportes. De hecho, entre los ciclistas habituales existe la consigna de que no termine con el impuesto a los combustibles, pero sí con el que grava a las bicicletas, algo que es recogido por el diputado Félix González (IND), quien ve en este modo una opción real para desarrollar.
“Hay personas que tal vez no puedan pedalear una hora, pero pueden utilizar un scooter. Entonces, creo que hay que explorar también algo que, como parlamentario no puedo hacer hoy día, porque tiene que ver con tributos, pero yo le quitaría los impuestos a los scooters, a las bicicletas y a todos estos medios de transportes, de manera que sea más accesible o subsidiarlos, porque la tecnología está e incluso hay otros medios que son como una especie de bicicletas techada y podemos avanzar hacia allá. Lo más importante es que hay voluntad de la persona de usarlas”, cerró el diputado.