Desde hace ya unos pocos años la gente empezó a tomar conciencia de cómo los transgénicos nos estaban enfermando y sobre todo en la Argentina, que es el segundo país en el mundo de cultivos de transgénicos y contaminación por pesticidas.
Es sobre todo a raíz de la pandemia que la gente empezó a informarse más acerca de cómo los alimentos nos enferman. Hay una mayor tendencia a elegir los alimentos ecológicos, se intenta que estos se abaraten poniendo en contacto directo al productor y el consumidor.
Hay mucha más conciencia de cómo los transgénicos han provocado un incremento masivo del uso de pesticidas, nos está enfermando.
Hay una tendencia de los pacientes a preocuparse por lo que comen y buscar alimentación sustentable.
VENTAJAS
Los alimentos sustentables que se han cultivado en forma ecológica con todos los esfuerzos que significa para un productor, traerá sus beneficios, luego valdrán la pena, debido a que una fruta o una verdura transgénica a nosotros nos llenan de contaminantes y nos desnutren, porque con el paso de los años cada vez más los suelos están arrasados de su verdadera composición y por lo tanto están contaminados.
Se han encontrado en el lecho del río Paraná pesticidas como el glifosato y, por otro lado, la carencia de nutrientes debido a haber arrasado el monocultivo de soja de una manera muy excesiva, tanto, que se llegó a transformar la Pampa húmeda en Pampa seca con cambios del suelo que arcilloso, generaba inundaciones.
Esto a su vez producía mayor erosión de los nutrientes que debería tener la tierra para que luego lleguen a nuestro cuerpo los nutrientes básicos de minerales y de vitaminas que una fruta y una verdura deben de proveernos.
Sabemos por análisis de frutas y verduras que las mismas están mucho más carentes de nutrientes básicos, qué hace 40 o 50 años. Por lo tanto, comparar hoy un producto que es verdaderamente ecológico, hace que la nutrición que llegue a nuestro cuerpo básicamente en relación a vitaminas minerales y también aminoácidos sea muy superior.
ETIQUETADO
Dentro de la educación que se está dando a la población para mejorar su nivel alimentario se impone fundamentalmente el Low Carb High Fat, es decir que bajen los carbohidratos y que suban las buenas grasas.
Al disminuir los hidratos invitamos a que no se consuman alimentos empaquetados, que son siempre en base a galletitas, gaseosa, fideos, que tienen primero el refinamiento de hidratos, de harina de trigo y productos también productos para celíacos como harina de arroz, de papa, maíz o de mandioca qué siguen siendo absolutamente refinados.
Esto se relaciona con pandemia de obesidad diabetes y arteriosclerosis.
Por otro lado, el hecho de que una persona compre etiquetados o sea productos envasados, sí le va ayudar tener el conocimiento en su etiqueta, dado que si está totalmente bien rotulado su contenido, podrá distinguir entre lo que es un hidrato artificial como la maltodextrina, que siempre está incluido en el jarabe de maíz de alta fructosa, dentro de los saborizantes y conservantes, dentro de cualquier alimento ya sea salado como una salchicha o dulce como las galletitas o las gaseosas.
Que los productos tengan la diferenciación en el etiquetado y que el consumidor sea educado en saberlo leer, va a colaborar con su salud, pero de todos modos siempre es mejor comprar alimentos no envasados: frutas, verduras, huevo, pescado, frutos secos, de modo que podamos ver con toda claridad el alimento real con la nutrición mejor lograda por los proveedores, y que al no estar envasado nos da máxima confiabilidad, de todos modos es una ayuda el tema de informarnos el procesamiento justamente de los alimentos procesados.
Dra. María Alejandra Rodríguez Zía
Médica clínica endocrinóloga UBA (M.N. 70.787)