VALÈNCIA. (EP) Los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, respectivamente, se han mostrado “perplejos” tras las declaraciones del presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, sobre la semana laboral de 4 días, han señalado que “con esta patronal no vamos a ningún sitio” y han defendido la necesidad de contar con organizaciones empresariales “con una visión más moderna, del siglo XXI y no tanto para atrás”.
Asimismo, han defendido que la jornada laboral de 32 horas semanales “es favorecer y fortalecer nuestros instrumentos desde el punto de vista del desarrollo económico y personal” y han lamentado que las afirmaciones de Garamendi son “poco pensadas o muy retrógradas y pensadas en los empresarios que, en lugar de pensar en la economía del mañana, piensan en la cuenta de resultados a corto plazo sin hacer ningún tipo de cambio”.
En declaraciones a los medios antes de participar en una conferencia en la Cumbre Internacional de la Semana de 4 días que acoge València este viernes y sábado, han respondido de esta manera a Garamendi, quien este viernes ha dicho en Murcia que la implantación de la jornada laboral de 4 días a la semana se enmarca en “los debates para ganar elecciones”.
Ante estas manifestaciones, el líder de CCOO, Unai Sordo, ha considerado que “con esta patronal no vamos a ningún sitio”, al tiempo que ha subrayado que la reducción de la jornada de trabajo “tiene que ver con la negociación colectiva y con una reivindicación sindical histórica” a la que los sindicatos “no hemos renunciado nunca”.
Sordo ha incidido en que “vale la pena” explorar la experiencia de la semana laboral de cuatro días, como en el caso de la Comunitat Valenciana, viendo “hasta qué punto la posibilidad de reducir la jornada laboral puede mejorar las ratios de productividad y estructura de costes.
En este sentido, ha respondido a Garamendi: “No hay por qué descalificar este tipo de medidas que nadie ha planteado taxativamente para todos los sectores. Necesitamos unas organizaciones empresariales con una visión más moderna y del siglo XXI y no tanto para atrás”.
El líder de CCOO ha incidido en que procesos como la digitalización y la robotización “tendrían que tender a mejorar la productividad de las empresas de forma compatible con la reducción del tiempo de trabajo” y ha defendido la “vigencia absoluta” de estas cuestiones en el marco actual.
También ha remarcado los beneficios que, a su juicio, conllevaría la aplicación de la jornada laboral de 4 días, entre ellas una “lógica reducción del tiempo de trabajo, evitar desplazamientos excesivos o una mayor conciliación”.
Para CCOO, ha añadido, “es un debate asociado a la reducción del tiempo de trabajo”, con el que los trabajadores puedan explorar fórmulas para disponer de más tiempo de desconexión, un tema, en definitiva, “absolutamente vigente vinculado a la digitalización”.
En esta línea, ha reclamado “erradicar” determinadas prácticas como la prolongación de la jornada laboral, al tiempo que ha reivindicado que la reducción de este tiempo es algo “plenamente vigente”. Así, ha señalado que una opción “viable para muchos sectores y empresas” es el debate de la ordenación, algo “tan importante como el volumen total de horas”.
De cualquier manera, Sordo ha apuntado que en determinados sectores y empresas acciones como estas son “perfectamente viables con opciones como el trabajo a distancia” y ha recalcado que la riqueza de la negociación colectiva “es poder adaptar las realidades de cada sector” a la jornada laboral de 32 horas. Eso sí, “siempre y cuando no hagamos modelos donde el mismo volumen de trabajo se concentre en 4 días para alargar la jornada”.
Por último, Sordo ha reflexionado sobre la reducción del tiempo de trabajo en España, que “a veces está asociado con prolongaciones de la jornada”, una práctica sobre la que ha pedido tener “especial cuidado”, y ha llamado a estar “muy vigilantes” a los datos de contratación de los últimos meses, puesto que, aunque son “buenos”, pueden “esconder un fraude de prolongación de la jornada laboral”.
Por otro lado, el secretario general del UGT, Pepe Álvarez, ha defendido también que el modelo de jornada laboral de 4 días es “un debate actual muy oportuno” y que “sin lugar a dudas es un elemento fundamental” no solo en la Comunitat Valenciana sino en Europa y el resto del mundo porque “estamos ante un tema clave”, puesto que el sindicalismo y el tiempo de trabajo “van de la mano”.
Sobre las declaraciones de Garamendi, ha reflexionado: “Cuando se implantaron las vacaciones, los empresarios decían que cómo iban a pagar por no trabajar, y hoy no pensamos que el mundo pueda existir sin vacaciones”. Por tanto, para Álvarez, “hablar de 32 horas es favorecer y fortalecer nuestros instrumentos desde el punto de vista del desarrollo económico personal”.
El máximo responsable de UGT, que se ha mostrado partidario de la jornada de 4 días a la semana, ha augurado que la reducción de la jornada laboral va a tener una implantación “mucho más rápida de lo que podamos imaginar”.
De hecho, ha asegurado que ya hay empresas que aplican este modelo, por lo que ha apostado por “empezar a visualizar en qué convenios colectivos de qué ámbitos lo podemos implantar”, con el fin de “romper el techo cristal de la mejor manera”.
Así, ha abogado por, en la medida que se deja atrás la pandemia, “ver en qué sectores se puede trabajar y, sobre todo, cuál es el compromiso de la Administración para apoyar a estos sectores, y si el Estado puede compensarlo en forma de ayudas de tipo fiscal”.
Paralelamente, Álvarez ha recordado el nacimiento de las organizaciones sindicales “como consecuencia de la reivindicación de las ocho horas diarias”, un momento desde el que “ha llovido mucho y no ha habido una reducción sustancial del tiempo de trabajo”.
De cualquier forma, ha insistido en la “necesidad imperiosa” de abordar el fenómeno de la hiperproductividad y de la eficacia económica, puesto que es “absolutamente imprescindible abrir el debate de acceder a un empleo digno”.
Y precisamente, sobre esta cuestión, ha considerado que la formación durante toda la vida, con la que se necesita “más tiempo para poder desarrollarse”, va a ayudar de manera “muy importante” a este debate al estar “de plena actualidad”. “Y eso hay que hacerlo manteniendo salarios”, ha defendido.