Se preguntarán qué pasó con Valentina López, la joven cantante que hace nueve años la rompió al abrir el concierto del mega artista canadiense Justin Bieber, en su gira por Ecuador en 2013. En aquella época ya había lanzado su primer álbum, y su sencillo ‘Believe’ sonó fuerte en las radios, lo que la llevó a ser una figura emergente muy popular en el medio. Recuerda la artista que antes de partir de Ecuador fue invitada frecuente a eventos, shows y conciertos, entre los que también destaca el haber sido telonera de Demi Lovato, Melendi y otros cantantes de talla mundial. La artista considera que fueron experiencias que permanecen dentro de ella. “Aprendí mucho y me siento muy identificada por todo lo que significó ese momento en mi vida”. No obstante, nunca imaginó lo que sería su vida casi una década después, al continuar su periplo artístico en el extranjero.
Su verdadera pasión
Radicada en Valencia, España (que fue su primera parada, acaso proverbial), pronto el contacto con el bajista y productor de la banda Presuntos Implicados, Nacho Mañón, fue determinante; no solo porque acabó produciendo dos sencillos de Kuinvi, ‘Miénteme’ y ‘Arcoíris’ (composición de la artista), sino que la condujo a lo que sería su verdadera pasión: la producción discográfica, abriéndole horizontes impensados. “Durante el proceso tuve la oportunidad de acompañar a Nacho en el estudio y ver cómo producía mis canciones. Para mí fue un descubrimiento muy loco ver cómo lo hacía… Me di cuenta de cuánto me apasionaba el proceso, porque si aprendía podía lograr que mis canciones suenen como yo quería, sin que nadie lo haga por mí. Nacho fue mi mentor”.
La travesía siguió en Boston, Estados Unidos, donde Kuinvi formalizó su aprendizaje en el Berklee College of Music en Producción Musical e Ingeniería de Sonido (Music Production and Sound Engineering). Allí, a la par, nació el nombre artístico con el que se la conoce en la industria por una estrategia de branding. “Todos mis amigos empezaron a llamarme ‘Queen V’ (Reina V, por su nombre, Valentina). Me gustó y lo adapté al español escribiéndolo como suena: Kuinvi”.
Estos últimos años la artista ha vivido en Miami, con el frenesí propio de su carrera, viajando constantemente, sobre todo a Los Ángeles, donde demandan su trabajo. A sus 28 años está determinada a no frenar y ser feliz en la ruta propuesta, con el apoyo incondicional de su familia, que la sigue de cerca desde Ecuador, al que regresa una vez al año para compartir y reencontrarse. “No importa lo que esté pasando en nuestras vidas, nos reunimos todos en Navidad. Hemos logrado tener una relación súper cercana y eso me ha ayudado a superar cualquier obstáculo que he tenido al vivir lejos. Mis padres me enseñaron, desde que tengo memoria, que no hay nada que no pueda lograr. Gracias a esa motivación empecé a trabajar en mi carrera como cantante a muy temprana edad y así ha sido hasta el día de hoy”.
El disco de Becky G., donde participa Kuinvi está ranqueado como el número 3 a nivel mundial. La artista fue elegida por Spotify como la productora que se viene con fuerza mientras su imagen fue transmitida en Times Square.
Logros recientes
Kuinvi fue contratada por Netflix para utilizar una de sus canciones en la película ‘365 day´s this day’, que circula ya en la plataforma mundial. Fue un tema producido y cantado por la artista. Además, acaba de firmar con Electric Film Entertainment para managment: “Esto es un paso muy importante, pues esta es una empresa americana que agrupa a artistas gigantes y que se alinean a mi visión”.
Paralelamente, la afamada cantante internacional Becky G lanzó hace pocos días su último disco, titulado ‘Esquemas’, en el que se incluyen seis temas compuestos y producidos por Kuinvi, lo que evidencia el sólido momento que atraviesa la artista en su camino hacia el éxito. Ella tuvo una manifestación antes, convencida de que podía aportar en el siguiente álbum de Becky G, y lo cumplió. El disco llega cargado de letras y ritmos explosivos, con una gran expectación en la industria discográfica que aglutina al público hispanohablante. “Tuve la bendición de producir seis temas de este álbum tan increíble. Reí, lloré, grité, tomé tequila y aprendí que la vida es muy corta para no atreverte a creer en ti misma”, reza en su cuenta de Instagram.
La cantante, compositora y productora de música se mueve firme en el mundo del espectáculo, con un lenguaje propio que empieza a resonar en la industria estadounidense, acompañada de un gran equipo de profesionales. “Estoy cumpliendo objetivos muy grandes que van a cambiar mi carrera. He podido encontrarme a mí misma, experimentar y entender cuál era mi llamado en la música”.
Cara a cara
- ¿Cómo ha sido la experiencia de vivir en Estados Unidos?
Es una cultura diferente, en el idioma, leyes, reglas. Es súper duro estar lejos de la familia, no voy a mentir, eso es lo que más me ha costado; pero hay que hacer sacrificios para lograr los objetivos y sueños. Dentro de mi familia lo tenemos claro, por eso tenemos una relación muy fuerte.
- ¿Regresaría a Ecuador?
Me gusta viajar y conocer el mundo, aunque Ecuador es mi hogar, mi casa. Tengo un sentido de pertenencia muy grande… Extraño el ceviche, el hornado, ¡los llapingachos! Nunca dejo de hablar de mi país, orgullosa de representarlo ¡y de ser ecuatoriana!
- ¿Mantiene amigos en el país?
Tengo amistades de muchos años, incondicionales.
- ¿Cuáles han sido sus modelos a seguir en la industria de la música?
Pharrell, emprendedor, compositor, productor, artista. Me identifico mucho con él. También Max Martin, al ser el productor más grande en los Estados Unidos. Y mis padres, por la manera en que ellos me criaron y de la que aún sigo aprendiendo.
- ¿El momento más difícil que ha vivido?
¡La pandemia! Fue muy duro estar lejos y no poder volver al país durante ese tiempo.
Sí, tengo una relación súper estable, saludable y feliz. Estamos en el mismo campo de la música y no puedo estar más contenta.
- ¿Qué es el éxito para usted?
No es la fama ni el dinero. Es levantarme feliz todos los días agradeciendo lo que tengo y lo que estoy viviendo.