domingo, 1 de mayo de 2022
14:58
La pandemia por coronavirus impactó de diversas formas en cada sector de la población. Un grupo que se vio fuertemente afectado por estas consecuencias fueron los adolescentes quienes vieron un aumento en las problemáticas de trastornos alimenticios.
San Juan cuenta con el Hospital de Día perteneciente al Servicio de Psiquiatría, en el hospital Rawson. En este 2022 hubo un incremento en las consultas diarias, por parte de los pacientes. Por eso trabajan fuertemente en el acompañamiento de los pacientes y para evitar que estos números sigan en aumento.
“Estamos atendiendo gran cantidad de pacientes, tenemos 14 pacientes internados en internación de día. Tenemos 5 pacientes diarios, es mucha la cantidad”, detalló, la referente en el tema, licenciada en Nutrición, Bernarda Páez a Diario La Provincia SJ.
La profesional detalló que se ha visto un aumento de casos, sobre todo por lo que acarreó la pandemia. “Dejó estragos importantes en todo esto, muchísimos casos de trastornos alimentarios, muchos los hemos estado viendo hace tiempo y otros recién ahora van a la consulta. Los padres recién ahora pueden ver el deterioro de los pacientes, pérdida severa de peso o una personalidad que llama la atención”, detalló.
Además, aseguró: “es una enfermedad 100% psicológica, siempre se lo digo a los padres, porque piensan que se soluciona comiendo. Lo nutricional ayuda mucho, pero la base de todo es la cabecita. El tratamiento es psicológico al 100% y en lo nutricional hay mucho para trabajar, son pacientes que dimensionan las cosas de otra manera”.
En cuanto al rango etario, la licenciada apuntó que la mayor concentración de casos se da en la adolescencia. “Actualmente, tenemos pacientes de 10 a 11 años, también tenemos de 38 a 40 años. Hemos tenido una paciente que lo venía callando hace mucho tiempo, de 55 años. Pero, casi siempre el rango etario se concentra en los adolescentes”, sostuvo.
La referente en el tema explicó que por lo general esta patología afecta principalmente a las mujeres, pero llamó la atención la presencia de los varones en las consultas. “Este año se ha visto más en los varones, sigue ganando en el número la cantidad de mujeres, pero nos asombró la cantidad de hombres que tenemos en las consultas, incluso internados. El paciente lo manifiesta con la comida, esto de no poder gritarlo o no poder decir lo que siente”, subrayó.
En verano es cuando los profesionales comienzan a registrar un aumento de casos llamativos. “Los meses donde hay mayor demanda son cuando empieza a llegar el verano, es cuando sienten mayor exposición a su cuerpo. A partir de septiembre se nota el incremento en esta patología”, remarcó.
En referencia a la demanda, la licenciada indicó que reciben consultas de los distintos departamentos de la provincia. “Tenemos demanda de todos los departamentos, lo vemos más en lo que es la zona de Capital, Pocito y zonas alejadas. Tenemos una paciente de San Luis, ya que en esa provincia no existe una institución que se encargue de trastornos alimenticios. Lo derivaron para hacer el tratamiento en la parte pública en el hospital Rawson”, mencionó.
La profesional remarcó que no se puede determinar un factor puntual que despierte esta problemática. “Es una patología que tiene una persona que es muy sensible y muy predispuesta a pasar esto. No tiene un motivo especifico, es multifactorial, no hay un solo factor que la determine, son un montón de cosas que padecen los pacientes”, remarcó.
“La distorsión de la imagen justamente en los pacientes con trastornos alimentario, es lo que diagnostica esta enfermedad”, agregó.
La licenciada destacó que “la paciente anoréxica tiene una dimensión de su cuerpo que es sumamente gorda, pueden comer poco y ver que están comiendo dos o tres platos de comida. Su dimensión es enorme, una distorsión de la imagen muy grande”.
Por esto, una de las conductas importantes a tener en cuenta es la forma de comer y la baja de peso. En las pacientes anoréxicas es mucho más evidente porque dejan de comer, son extremistas, son capaces de hacer ayuno y de no comer nada, son perfectas en su alimentación jamás tienen un atracón. Se debe tener en cuenta la baja de peso, la falta de la menstruación, hipotermia, entre otros factores. Algo muy importante a tener en cuenta es que se aíslan de una manera que llama la atención. De repente no quieren salir, porque evitan situaciones en las que ellos tengan que estar con la comida. “El aislamiento en esta enfermedad es sumamente importante y los cambios de humor repentino. Esto es tanto para bulimia como anorexia”, explicó.
Respecto a la bulimia, la profesional detalló que “es otra cosa porque tal vez los padres no se dan cuenta, ya que no sufren una pérdida de peso, es una paciente normal, hasta muchas veces las pacientes tienen sobrepeso. Lo que hay que tener en cuenta es que estos pacientes tienen atracones, comen gran cantidad de comida que muchas veces es a escondidas, vómitos después de cada comida, controlar el ingreso al baño, en estas pacientes hay muchas autoagresiones”, cerró.
El tratamiento integral que ofrece el Hospital de Día
El tratamiento tiene un lapso de un año y medio a dos, esto va a depender de cada paciente. La referente en el tema, licenciada en Nutrición Bernarda Páez, resaltó que no pueden estirar el lapso de internación a más de dos años.
“Nosotros en Hospital de Día trabajamos con una media alta, en lo cual le damos al paciente para que se vaya adaptando de a poco este cambio de volver a su casa. Consiste en ir algunos días a su casa y otros se quedar en el hospital, hasta tener el alta total del tratamiento”, indicó la profesional.
La referente en el tema detalló en que en consultorios externos es donde tienen un primer acercamiento con el paciente. “En consultorios externos que es por donde se atienden a los pacientes, es una primera admisión en la cual está el psiquiatra, la psicóloga y los padres, sobre todo si el paciente es menor de edad. Los pacientes se siguen por consultorio, pero si nosotros vemos que es muy complicado seguir la patología por consultorio es cuando se indica la internación en Hospital de Día”, explicó.
“El horario en los cuales ingresan los chicos es a las 9 de la mañana hasta las 14 horas. Estamos de lunes a viernes y no es una internación que es con cama, es una internación de día. Los chicos ingresan, reciben un control de los signos vitales por los enfermeros y recién pasan a las salas. Ellos almuerzan en el hospital y tienen diferentes actividades: nutricionales, psicológicas y físicas, dependiendo de cada paciente y de lo que puede hacer. Es un tratamiento perfecto y único en la provincia y se brinda de forma pública”, detalló.
Los profesionales están desde las 7 de la mañana para brindar la información. “Trabajamos a pulmón, es un equipo de psicólogos, psiquiatras, enfermeras, acompañante terapéutica, educación física, asistentes sociales, la verdad es un gran equipo. Es un trabajo multidisciplinario y diario, son pacientes que necesitan mucha en contención, eso es fundamental. Desde el año pasado los padres de las pacientes de Hospital de Día, que estuvieron internadas, crearon una comisión y brindan mucha información, a los padres que ingresan”, concluyó.