Web 3.0: Mover un activo digital de un monedero de criptomonedas a otro puede causarle migraña, dice Ahmed Al-Balaghi, director ejecutivo de Biconomy. Los desarrolladores deben trabajar para brindarles a los usuarios de la Web 3.0 una mejor experiencia.
Preparemos la escena
Eres una persona normal que ha decidido probar la Web 3.0 después de leer sobre todas sus oportunidades en Internet. Envalentonado, configura su MetaMask, un monedero construido en Ethereum, una importante blockchain. No puede esperar para comenzar a usar sus tokens cripto para acceder a una biblioteca completa de aplicaciones descentralizadas (dApps), que son la versión de Web 3.0 de las aplicaciones Web 2.0.
Pero te encuentras con dificultades. En primer lugar, no puede usar sus tokens cripto basados en Ethereum en una dApp que desee usar. Después de investigar durante muchos minutos frustrantes, te das cuenta de que la dApp se basa en la blockchain de Arbiturm. Arbitrum es una blockchain de Capa 2, lo que significa que técnicamente es compatible con la de Ethereum y, al mismo tiempo, está separada de ella.
Para evitar este contratiempo, se ve obligado a realizar cambios en Metamask. Pero las cosas se complican aún más cuando te golpean con tarifas de gas deslumbrantes, el precio que pagas a los mineros que ejecutan tus solicitudes en la blockchain, para mover tus fondos de Ethereum a Arbitrum.
Muerdes la bala, con la esperanza de que finalmente puedas usar la dApp. ¡Pero no! Movió USDT al arbitraje, pero necesita ETH para pagar la gasolina para hacer cualquier cosa. Por lo tanto, también debe enviar ETH y, una vez más, pagar la tarifa de gas deslumbrante. A estas alturas, no puede permitirse el lujo de usar ninguna de las funciones de estas dApps y todo su entusiasmo por probarlo se ha desvanecido.
Profundamente frustrado por los obstáculos que debe superar, renuncia por completo a Web 3.0 y promete no volver a usar cripto nunca más. Desanimado, regresa a la comodidad familiar y la facilidad de las aplicaciones Web 2.0.
La experiencia del usuario de Web 3.0 todavía está llena de fricciones y frustraciones
El escenario anterior es un ejemplo de las frustraciones que experimentan los nuevos usuarios con las dApps. Las interfaces en muchas dApps son similares a algo que uno encontraría en Windows 95, lo que las hace engorrosas de maniobrar sin conocimientos técnicos.
Además, ejecutar lo que deberían ser solicitudes simples en una dApp, como usar un token para comprar un token no fungible (NFT), requerirá que los usuarios paguen una tarifa de gas adicional que a veces puede exceder el valor del NFT en sí. Las tarifas promedio de gas en Ethereum, en las que se basan muchas dApps, son de alrededor de 46 dólares. Esto es 20 veces más alto que cualquier otra cadena.
Ha habido mucha expectación acerca de cómo Web 3.0 iba a marcar el comienzo de la próxima era de la web. Las DApps basadas en blockchains están descentralizadas, son incorruptibles y protegen la privacidad de los usuarios. Esto contrasta con la Web 2.0, donde las grandes empresas tecnológicas explotan los datos de los usuarios. Si bien todo esto es cierto, el hecho es que las dApps tienen un problema importante en la experiencia del usuario (UX).
Ventajas de la Web 2.0
Si observamos las aplicaciones Web 2.0, rara vez hay fricción cuando se trata de incorporar usuarios. Si alguien quiere crear una cuenta en Facebook, todo lo que necesita hacer es completar un formulario digital con sus datos personales y en segundos tiene una cuenta. Transferir dinero de una cuenta bancaria a otra en una app de banca móvil requiere un esfuerzo mínimo.
Por el contrario, mover un activo de un monedero cripto a otro puede provocarle migraña.
Para que las dApps alcancen todo su potencial y se conviertan en la próxima evolución de la Web, entonces la experiencia del usuario debe ser perfecta. Esto es a lo que los usuarios están acostumbrados al usar los servicios de la Web 2.0.
Por supuesto, blockchain es una tecnología emergente, por lo que se esperan fallas. Habiendo dicho eso, no significa que los desarrolladores de la Web 3.0 no puedan comenzar a rectificar las complejidades de incorporación y los puntos débiles de UX inherentes a muchas DApps.
¿Puede el futuro ser verdaderamente sin gas?
Hemos establecido previamente que las tarifas de gas, particularmente en Ethereum, pueden ser muy altas y costosas. Como resultado, el proceso de incorporación de dApps no solo es difícil sino costoso.
Aunque el costo de las tarifas de gas en Ethereum puede variar, debido a varios factores, en última instancia, las tarifas son altas debido a la congestión en la blockchain. En pocas palabras, hay demasiadas personas que usan dApps con tecnología Ethereum. Para ejecutar todas estas transacciones en Ethereum, los mineros necesitan una mayor remuneración, lo que genera tarifas de gas altas.
Hasta ahora, quienes trabajan en este problema de las altas tarifas de gas han recurrido a las soluciones de Capa 2. Estas son cadenas que operan sobre la blockchain Ethereum y transmiten transacciones como paquetes, por lo tanto, pagan solo una tarifa de gas por múltiples transacciones. Esto quita la carga de la cadena Ethereum y reduce el costo para los usuarios.
Esto ha creado una situación en la que hay varias blockchains de capa 1 como Ethereum, Avalanche y otras junto con soluciones de capa 2 que operan en ellas. Conectar estas cadenas en una operación multicadena para la Web 3.0 significa una mayor escalabilidad que también se traduce en tarifas de gas más bajas a medida que la congestión se distribuye entre las blockchain.
Un futuro sin gasolina
Para la Web 3.0, el futuro solo será brillante cuando no tenga gas. Desafortunadamente, debido al enorme esfuerzo computacional que aún se requiere para mantener las blockchain en funcionamiento, las tarifas de gas no se erradicarán por completo en el corto plazo, incluso con todas nuestras soluciones de escalado. Sin embargo, eso no significa que no se puedan descargar en otro lugar para que los usuarios no tengan que pagar.
En lugar de exigir a los usuarios que paguen tarifas de gas para hacer cualquier cosa en una dApps, la aplicación puede absorber este costo como parte de la inversión operativa. Por ejemplo, las dApps web2 tradicionales pagan por el alojamiento en la nube y los costos del servidor para toda su actividad de usuario. Si las dApps pueden eliminar las tarifas de gasolina para los usuarios, cubriendo o patrocinando las tarifas de gasolina, esto elimina una barrera para la entrada de nuevos usuarios que se sumergen en el mundo de la Web 3.0 por primera vez.
Paga la gasolina como quieras
Reducir significativamente, o mejor aún, erradicar por completo las tarifas de gas es definitivamente un paso en la dirección correcta. Pero el tema de las tarifas de gas no es el único problema que experimentan los nuevos usuarios con las dApps.
El uso de dApps puede estar lleno de frustraciones y esto se puede atribuir en gran medida a cómo se requiere que los usuarios usen el token nativo de una dApp para hacer cualquier cosa en él. Si es un usuario nuevo y no tiene ETH, entonces muchas dApps en el ecosistema de la Web 3.0 no se pueden usar. Esto pone a los usuarios en una posición difícil de tener que cambiar cualquier token existente que tengan por ETH o castigar su monedero tratando de comprar algunos.
Para crear una experiencia agradable en dApps, los desarrolladores de la Web 3.0 necesitan implementar soluciones dentro de sus aplicaciones que permitan a los usuarios interactuar con dApps con cualquier token que deseen. Ya sea pagando tarifas de gas o realizando una acción, los usuarios deben poder elegir cómo quieren pagar. Al brindar opciones a los usuarios, en lugar de limitarlos a un solo token para el pago, la experiencia del usuario no solo es más fluida, sino que aumenta significativamente la accesibilidad de las dApps.
Experiencia multichain perfecta
Esta opción de pago con token no es la única forma en que la experiencia actual de la Web 3.0 está aislada. La naturaleza independiente de las diferentes blockchains dificulta la navegación y la interacción con el espacio.
Actualmente, las personas necesitan conocer las diferentes blockchains, lo que hacen y las herramientas específicas necesarias para interactuar con cada una. Una experiencia multicadena significaría que un usuario ni siquiera necesitaría saber en qué cadena está mientras la usa. Más bien, simplemente completarían las tareas mientras la dApp se ocupa de los aspectos básicos en segundo plano.
Web 3.0 debe aprender de la Web 2.0, si quiere reemplazarlo
Dicen que la imitación es la forma más sincera de adulación. En el caso de la Web 3.0, imitar cómo los desarrolladores de la Web 2.0 agilizan la experiencia UX es más que un halago: es una necesidad. Hacer una comparación entre las apps de la Web 2.0 y Web 3.0 es injusto, ya que los desarrolladores de la Web 2.0 han tenido al menos dos décadas para perfeccionar la experiencia UX.
Pero en muchos sentidos, esto también es una bendición para los desarrolladores de la Web 3.0 porque se ha establecido el libro de jugadas para optimizar el diseño de UX. El siguiente paso ahora es que los desarrolladores de la Web 3.0 implementen las soluciones correctas en dApps para crear una forma sencilla y sin esfuerzo para las personas que desean participar en la acción de la Web 3.0 sin tener que ser un genio de la tecnología o gastar una fortuna para hacerlo.
El futuro de la web sigue siendo blockchain. Solo necesita suavizar algunas cambios.
Sobre el Autor
Ahmed Al-Balaghi es director ejecutivo y cofundador de Biconomy, una red repetidora de blockchains múltiples que simplifica la experiencia de la Web 3.0. Como plataforma de desarrollo, permite a los desarrolladores de blockchain permitir una transacción simplificada y una experiencia de incorporación para su proyecto en la Web 3.0, es una empresa que se esfuerza por brindar simplicidad a DeFi.
Con más de tres años de experiencia en la industria de la blockchain, que abarca China, el Reino Unido y los Emiratos Árabes Unidos, Ahmed está trabajando para avanzar en un futuro multicadena. Él cree apasionadamente que el futuro del ecosistema de blockchain solo estará asegurado si todas las blockchains pueden integrarse entre sí.
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