ACAPULCO.— Hoy en la tarde se inaugura formalmente la Convención de la Asociación de Bancos de México, que preside Daniel Becker, y en la que el mayor interés es escuchar al secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O; a la gobernadora del Banco de México, Victoria Rodríguez, justo después del anuncio sobre el alza en tasas de interés y, desde luego, al presidente López Obrador. Entre los temas obligados que ya adelantaron tanto el propio López Obrador como Ramírez de la O está la presión a los bancos para que presten más, principalmente a las pymes, y que sean promotores de la inversión y el desarrollo de México.
López Obrador seguramente reiterará sus “propios datos” sobre el crecimiento de México e insistirá en presumir como suyos logros que no lo son, como la estabilidad en el tipo de cambio y el aumento en las remesas, que dependen del comportamiento del dólar a nivel internacional y de la recuperación de la economía en Estados Unidos. Y reiterará que hay condiciones para invertir en México, por la “gobernabilidad, paz y tranquilidad”, cuando la violencia sí es una de las mayores preocupaciones del sector privado.
En cuanto a Ramírez de la O, seguramente se hará eco del optimismo económico y se esperan más detalles del programa de inversión por un billón de pesos en infraestructura, no sólo en las obras insignia de la 4T, sino en proyectos como el desarrollo de parques industriales para sustituir importaciones asiáticas, disminuir los problemas en cadenas de suministro y aprovechar las oportunidades del T-MEC y del Tren Transístmico.
¿REGAÑO O EXHORTO?
La duda es si habrá exhorto o regaño a la banca, que tiene una liquidez superior a 1.4 billones de pesos. Lo que tenemos que preguntarnos es si no hay crédito porque los bancos no quieren prestar e imponen demasiados requisitos y garantías muy elevadas, o porque realmente no hay demanda. Un hecho innegable es que la inversión privada se mantiene frenada no sólo por la pandemia, sino por la incertidumbre jurídica que generan iniciativas como la reforma eléctrica, que aún no se ha modificado.
Hay quien dice que si Bill Gates hubiera nacido en México seguiría trabajando en la cochera de su casa o armando computadoras pirata, porque aquí no hay facilidades para que los jóvenes sean emprendedores y crear sus propias empresas. Pero el problema no es sólo la banca comercial, sino la deficiente actuación de la banca de desarrollo.
Los bancos reiterarán hoy su compromiso por apoyar el crecimiento del país y reactivar el crédito, pero se requiere de una coordinación más efectiva con la banca de desarrollo, con programas para pymes y nuevas empresas. El problema de pretender reactivar el crédito por ley, regresar a los cajones crediticios que prevalecían en los años 70 o bajar las tasas por decreto, justo en una coyuntura de alzas en tasas, no harían más que generar más incertidumbre y ahuyentar la inversión.
VENTA DE BANAMEX
Uno de los temas más comentados en radio pasillo es la venta de Banamex, después de que Banorte reiteró su interés de comprarlo. Aunque López Obrador confirmó que prefiere que quede en manos mexicanas, no hay impedimento legal para que participen extranjeros en la venta, que definirá Citi hasta el tercer trimestre de 2022.