Katherine Uribe tiene en su ADN el gen emprendedor. Si un servicio o producto no está en el mercado o no cumple los parámetros que estima que debe tener, ella se encarga. Busca opciones y si no las hay, las crea. Especialmente si se trata de dos de sus pasiones: la decoración de interiores y los perritos.
“Siempre de un problema se encuentra una solución”, comenta a Esfuerzo Pyme y Publimetro. Y luego de pensarla un poco corrige: “Siempre de un problema sale una solución, y de ahí un emprendimiento”, agrega.
Pasó cuando buscaba muebles y adornos para su casa. Llamó a 10 decoradores, entre personas y empresas. Llegaron dos y ellos no cumplían las expectativas que como clienta se había hecho. Fue así como el 2008 fundó @KuaDeco, emprendimiento de decoración de interiores que ya está en etapa de crecimiento.
Hace unos años pasó una situación parecida cuando buscaba camitas para sus canes Kira y Morita. Buscó y buscó. Nada como ella se imaginaban y veía en redes sociales como Pinterest. Al final, compró unas que no le gustaron, además de ser incómodas, difíciles de lavar y pesadas. Ahí nació @KuaPets, camitas con mucho estilo, hecho a mano, lavables, transportables y exclusivas.
Apasionada
Ante la pregunta qué característica de ella la hace tomar la determinación de buscar una solución, dice clara y segura: la pasión.
“Esto de ser emprendedora es algo que se lleva adentro. Es un estilo de vida bien particular, bien entretenido, emocionante, pero a la vez es de mucho esfuerzo y perseverancia. Hay muchas cosas muy lindas del emprendimiento, hay mucho que aprender todos los días, y hay que ponerle pasión, de lo contrario no resulta”, explica.
De principio a fin
Con KuaDeco partió ella viendo telas, el tema de los colores de los productos y determinado los servicios que prestaría este emprendimiento que ya va para los 15 años de existencia y que ahora está a cargo del marido de Katherine.
Y en las camas para los canes, igual. Ella diseñó, buscó los materiales, los mejores, las hizo y hasta las probó con sus dos regalonas. “En este caso hice las camas, quedaron tan bien que pensé en difundirlas, y resultó”, añade.
Las camas son bonitas, cómodas, transportables, lavables “y todo nuevo producto que agrego lo testeó con mis mascotas o una prima de ellas, una perrita chica. Y a pesar de que ella le gusta escarbar, porque como perro chico es muy hiperquinética, las camas aguantan. Y si un cliente compara un producto y hay un problema, yo respondo personalmente, porque como todo emprendedor apasionado veo todas las etapas del negocio de principio a fin”, asegura.
– Independiente de que encontraste un nicho con las camas para perros, ¿por qué partir con otro emprendimiento cuando ya tenías uno funcionando?
– Es muy importante cuando uno es emprendedor seguir buscando y tomar riesgos. En ocasiones resultan, en otras no. Lo trascendental es intentarlo, tomar algo de riesgo en lo que uno hace.
– Un consejo para quienes deseen emprender y no se atreven o no tienen una idea clara.
– Todos los emprendimientos parten por una necesidad, sin embargo, te tiene que apasionar la solución para que te embarques. Es muy importante estar feliz con lo que haces y entregas.