Destila sentido del humor. Mijailo Fedorov, ministro de Transformación Digital de Ucrania, bromea en su cuenta de Twitter con Elon Musk, fundador de SpaceX, sobre la posibilidad de enviar a Júpiter a Vladimir Putin. «Todos quieren que Putin muera. Hasta que esto pase, damos a los ucranianos y a todo mundo una oportunidad única: vamos a enviarle a Júpiter. Dona 2.99 dólares para financiar un cohete. Todo se dedicará a la reconstrucción de Ucrania», escribió en un tuit el 1 de marzo. Ha vuelto sobre el tema varias veces.
Con apenas 31 años, Fedorov es el guerrero al mando del ejército digital del presidente Volodimir Zelenski. Sabe cómo combinar tecnología y finanzas y ha puesto estas armas del siglo XXI al servicio de Ucrania.
Uno de sus golpes de efecto al principio de la guerra fue conectar con Elon Musk para que ayudara a Ucrania a no quedarse aislada tras la invasión perpetrada por el líder ruso, Vladimir Putin, el pasado 24 de febrero. Musk envió antenas de Starlink a Ucrania. «Aquí tenemos Starlink. Gracias, @elonmusk», contestaba apenas cuatro días después. Es un gesto generoso pero Musk también sabe que en Ucrania podría poner a prueba su último juguete, creado para desenvolverse en territorio hostil.
Fedorov lo presentó como si fuera algo espontáneo pero en una entrevista en Time admite que hubo mucho trabajo detrás. Pero forma parte de la estrategia que parezca que todo fluye.
Está revolucionando la forma en que se conduce una guerra gracias al recurso a redes sociales, criptomonedas y herramientas digitales. Gracias a su dominio de estos recursos, y con ayuda de un grupo de hackers voluntarios, ha llegado muy lejos, mucho más de lo que imaginaba el Kremlin.
Ucrania se ha beneficiado mucho de la digitalización… Si no tuviéramos esta ventaja, sería mucho más difícil»
yevhen fedchenko, stopfake
«Creo que Ucrania se ha beneficiado mucho de la digitalización, algo que hace que muchos procesos funcionen incluso en la guerra. Si no tuviéramos esta ventaja, sería mucho más difícil», afirma Yevhen Fedchenko, cofundado de StopFake, una iniciativa para poner freno a las fake news del Kremlin.
Fedorov ha reconocido en The New York Times como una de sus metas era un bloqueo digital de Rusia. Para lograr este fin ha logrado aliarse con grandes compañías como Netflix, Google, PayPal, Intel, Apple, que han dejado de hacer negocios con Rusia.
Las sanciones de las potencias occidentales han sido cruciales, y el hecho de que se ha trasladado a la opinión pública de forma muy efectiva las consecuencias de la guerra. Por ello Zelenski aprovechó su alocución a los congresistas de EEUU este miércoles para ilustrar con un video esta devastación. La batalla mediática también la tienen ganada los ucranianos.
Bloqueo a los rusos
El objetivo del ministro digital es que los ciudadanos rusos sientan que están aislados y que culpen por ello a quien ha propiciado esta guerra, Vladimir Putin. Busca que los rusos rompan su silencio porque ese silencio es un silencio cómplice, a su juicio.
A su vez, su Ministerio ha creado un fondo en criptomonedas para financiar las operaciones militares ucranianas. Han recaudado cerca de 60 millones de euros.
A Fedorov la guerra le ha tocado directamente. Su padre tuvo que ser hospitalizado por el impacto de un misil en el edificio contiguo al suyo. Este emprendedor de éxito jamás habría imaginado que iba a tener que poner su conocimiento al servicio de su país en una guerra.
Las batallas que había librado hasta el momento eran mediáticas. Procedente de Vasylivka, en el sur de Ucrania, creó una compañía de marketing digital llamada Smmstudio especializada en campañas publicitarias online.
En 2018 Volodimir Zelenski, entonces un actor de éxito que decidió lanzarse a la arena política, le reclutó como jefe de su campaña digital. Fedorov fue quien creó la imagen de cambio en torno a Zelenski, un cambio que cautivó a los ucranianos. En las elecciones superó el 73% de los votos.
En esa campaña presidencial recurrió a Telegram, cuya aplicación de mensajería instantánea se ha convertido en clave en la guerra que se libra en el terreno de la información. Cualquiera que siga estos días a Zelenski se dará cuenta de lo mucho que ha aprendido del joven ministro digital. Domina los mensajes y las redes sociales y adapta lo que dice al público al que se dirige.
De Silicon Valley a su ejército de ‘hackers’
Fedorov supo ver la importancia de las grandes empresas tecnológicas y por ello emprendió una gira por Estados Unidos, con parada especial en Silicon Valley, unos meses antes de que estallara la guerra, ya como ministro de Transformación Digital. Tim Cook, director ejecutivo de Apple, o Elon Musk sabían quién era cuando Ucrania necesitó ayuda.
A algunos les cautivó con mensajes como estos: «Mark, Zuckerberg, mientras tú creabas Metaverso, Rusia arruinaba la vida real en Ucrania». O bien: «Matan a nuestros niños, mata su acceso», le decía al CEO de Apple para que bloqueara el acceso a la App Store.
Pero su estrategia no solo se basa en ganarse aliados entre las grandes tecnológicas, sino que también se fundamenta en su IT Army, su ejército de especialistas informáticos que protegen la estructura cibernética de Ucrania, y los voluntarios que los ayudan, hackers de primer nivel que combaten contra Rusia en el ciberespacio. Contaría con unos 300.000 voluntarios.
Ucrania cuenta con experiencia en estas lides, ya que Rusia recurre a la desinformación y los ciberataques desde hace años contra el país vecino. Pero Fedorov y su equipo son muy superiores. Juegan en otra liga.
«Creo que el futuro es tecnológico y por eso ganaremos. El liderazgo ruso vive todavía en el siglo XX y no se han dado cuenta. No saben que ahora los gobiernos funcionan más como compañías tecnológicas, no son rígidos como un carro de combate», ha confesado a Time.
Al igual que Zelenski se ha visto forzado a transformarse en un presidente en guerra, que constantemente insufla moral a los ciudadanos, a la vez que traslada a los dirigentes extranjeros y la opinión pública internacional la imagen de un país en lucha por su libertad, en la trastienda, Fedorov combate para que esta lucha por los corazones y las almas llegue a todos y sin interrupción.
La tecnología es vital, pero es la fe en su marca lo que les mueve. Su marca es Ucrania. Y tanto Zelenski como Fedorov han logrado que sea sinónimo de libertad, democracia, independencia.