Una de las pasiones de Mauricio Macri es jugar al bridge. Sin competiciones internacionales desde octubre de 2019, a finales de este mes se jugará el mundial en Italia. Hacia allá tiene previsto viajar el expresidente y, por eso, le pidió autorización al juez federal Julián Ercolini –que tiene la causa del espionaje a los familiares del ARA San Juan por la que Macri está procesado–. Ercolini accedió al pedido de Macri y dejó en reserva, como había pedido la defensa del expresidente, dónde se alojará durante su travesía que también incluirá España, Estados Unidos y Qatar –sede del próximo mundial de fútbol–.
Macri tenía en su agenda el 45° Mundial de Bridge, según publicó semanas atrás el periodista Rodis Recalt en Revista Noticias. La competencia se hará entre el 27 de marzo y el 9 de abril en Salsomaggiore Terme, en Parma. Macri es uno de los integrantes del equipo senior que representará al país, según surge de la web de la Confederación Sudamericana de Bridge.
El viernes, el abogado defensor de Macri, Pablo Lanusse, presentó un escrito en el que informaba que Macri tenía planeado estar fuera del país entre el 25 de marzo y el 9 de abril. En esa presentación, anunció que haría otra con los detalles de la estadía pero le pidió a Ercolini que la reservara para que no accedieran el resto de las partes. Las fechas coinciden con el torneo de bridge.
Este mediodía, Ercolini autorizó el nuevo viaje de Macri, que no solo incluirá su paso por Italia, sino que también suma España, Estados Unidos y Qatar –según la resolución a la que accedió Página/12–. El juez ya había anunciado que autorizaría los pedidos para salir del país de Macri porque entiende que están justificados por su calidad de expresidente y porque era el estándar que había establecido la Cámara Federal de Mar del Plata cuando la causa aún tramitaba en Dolores.
En este momento, Macri está fuera del país. Viajó el domingo hacia Estados Unidos para participar de unas clases en el Centro para la Libertad Económica Adam Smith de la Universidad Internacional de Florida. Estará allá hasta el 21 de marzo. Unos días antes, había hecho un viaje de un día a Montevideo –en avión privado– para ser parte de un evento de una empresa que se dedica a los mercados offshore. La querella que encabeza Valeria Carreras se había opuesto a que viajara y recordó que allá está prófugo Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, uno de sus asesores estrella en materia judicial.
La investigación sobre el rol de Macri en el espionaje a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan, el submarino que se hundió en noviembre de 2017, comenzó el 1 de octubre pasado. Ese día, el juez federal Martín Bava –que subroga en Dolores– decidió convocarlo a indagatoria. Casualmente, el expresidente estaba de viaje en Estados Unidos al recibir la noticia. Macri logró estirar más de un mes su presentación ante el magistrado, que lo terminó procesando el 1 de diciembre último. Para Bava, Macri ordenó las tareas que la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) hizo sobre las familias entre 2017 y 2018. Los espías, según entendió el juez, siguieron a los parientes para anticiparle a Macri cuáles serían sus reclamos en un tema que atraía la atención internacional.
Denuncian privilegios
Carreras se opuso a que Ercolini le dé carácter de “reservado” al trámite por el viaje de Macri al sostener que era infundado y acrecentaba el temor de fuga del expresidente, pero el magistrado no compartió su criterio. “Como querella advertimos que no hay igualdad ante la ley ni juez imparcial en la causa de espionaje ilegal a las familias del ARA San Juan. Ya recusamos a Ercolini”, le dijo Carreras a Página/12 tras conocerse la resolución del Juzgado Federal 10. “Ahora, solo nos queda la justicia internacional y queda confirmada nuestra certeza: Comodoro Py garantiza la impunidad”.
En el escrito que presentó el lunes por la mañana, la abogada hizo una larga mención a los destinos que visitó Macri en los últimos tiempos y a cómo se publicitaron en los medios de comunicación:
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Estuvo en Riad, Arabia Saudita, donde incluso se supo que comió en el restorán El Lechazo, donde cocina un pergaminense.
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Visitó Chile para hablar supuestamente sobre el cambio climático, pero el diario Clarín anticipó que mantendría un encuentro con Sebastián Piñera para darle su apoyo público.
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En el verano alternó entre el country Cumelén de Villa La Angostura y la estancia de Joe Lewis, según publicó este diario.
Macri no parece demasiado conmovido por el trámite de la causa que lo tiene como el principal imputado, especialmente después de que la Cámara Federal de Casación Penal le sacara las investigaciones a Bava. Ahora, es la Cámara Federal porteña la que debe revisar su procesamiento por el espionaje a las familias del ARA San Juan. Carreras recusó a los tres integrantes de la Sala I –Pablo Bertuzzi, Mariano Llorens y Leopoldo Bruglia– para entender en el expediente y, hasta que no resuelvan esos planteos, todo el trámite quedó suspendido.
Por el espionaje a las familias de los submarinistas también están procesados los exjerarcas de la AFI macrista, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani. Están en la misma situación otros directivos de importancia dentro de la exSIDE como el exdirector de Reunión Eduardo Winkler –actualmente funcionario del Ministerio Público de la Ciudad de Buenos Aires– y los exdirectores operacionales de Contrainteligencia Diego Dalmau Pereyra y Martín Coste. Como las tareas de inteligencia se hicieron desde la base Mar del Plata, Bava también procesó al exjefe de esa delegación Nicolás Iuspa Benítez y a otros cinco agentes que se desempeñaban bajo sus órdenes.
